El Instituto de Desarrollo Social Argentino (IDESA) advirtió que una de las principales distorsiones del sistema tributario argentino son los regímenes de pago anticipado del Impuesto sobre los Ingresos Brutos que actúan mediante retenciones sobre pagos hechos con transferencias bancarias, tarjetas de débito y crédito y billeteras virtuales. Recalcó que promueven el uso de dinero en efectivo, un mecanismo de pagos ineficiente, y generan evasión impositiva.
En esa línea, sobre la “ley ómnibus” que presentó el Gobierno nacional, que aborda el tema en el artículo 213 con el fin de eximir de las retenciones bancarias a los pequeños contribuyentes, estimó que el planteo es parcial porque beneficiaría a un universo relativamente bajo de personas; es decir, deja en pie gran parte del esquema.
El IDESA también aseveró que otra “debilidad” de la iniciativa es que son altas las probabilidades de que las provincias, que usan las retenciones bancarias para recaudar Ingresos Brutos, cuestionen el artículo.
Consignó que, según datos oficiales, para las provincias se observa que: del total de impuestos, el 78% se recauda con Ingresos Brutos; que del total de Ingresos Brutos, el 57% se obtiene por regímenes de retención y que dentro del 57% de éstos, 36 puntos porcentuales son retención mandadas a hacer a los bancos, tarjetas y billeteras virtuales.
“Estos datos muestran que los regímenes de retenciones bancarias son muy importantes para las provincias. De manera sintética, aproximadamente 1 de cada 3 pesos de Ingresos Brutos se recauda a través de retenciones sobre movimientos bancarios, tarjetas y billeteras virtuales”, resaltó.
El IDESA afirmó que los números son “evidencia contundente” de que es previsible un fuerte rechazo a la limitación de su uso y que, si se aprueba el artículo tal como está redactado, es muy probable que se generen litigios.
“El Congreso tiene la oportunidad de hacer un aporte muy positivo para el desenvolvimiento de la economía mejorando el diseño de la norma”, enfatizó el instituto.
Expuso que el objetivo debería ser que el sistema de pagos no sea distorsionado por mecanismos que lo usan para adelantar el cobro de impuestos y que para ello “se debería establecer expresamente que bancos, tarjetas de crédito y billeteras virtuales no pueden ser obligados a aplicar retenciones de impuestos”.
Bajo esa premisa, aseveró que el impacto inmediato “será un gran alivio administrativo y financiero para los contribuyentes y una reducción de la evasión impositiva porque espontáneamente se tenderá a usar menos los pagos en efectivo”.
“Para que el planteo sea atractivo para las provincias, junto con la prohibición de las retenciones bancarias, es necesario que la AFIP celebre convenios de colaboración para integrar la recaudación del IVA con el Impuesto a los Ingresos Brutos. Este cobro integrado es operativamente factible y permitirá mejorar ostensiblemente los niveles de cumplimiento”, sumó.
“Promoviendo el uso de dinero digital, la AFIP y las provincias pasan a disponer de mejor información de los pagos lo que posibilita ampliar la base imponible tanto del IVA como de Ingresos Brutos. Para las provincias es la oportunidad de aumentar la recaudación dejando de aplicar simultáneamente retenciones bancarias”, agregó el IDESA en el informe que difundió.
“Si el Congreso aplica algunos ajustes sobre su redacción, eliminando todas las retenciones y promoviendo la integración de Ingresos Brutos con IVA, se podrá avanzar de manera más ambiciosa en la promoción del uso del dinero digital sin entrar en conflicto con las provincias. El resultado será un sistema tributario más empático con los ciudadanos y con menores niveles de evasión”, cerró.