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La estabilidad del dólar y el freno en la inflación impulsaron la suba. Se incrementaron tanto los minoristas como los mayoristas, así como los públicos y privados.
Diversas variables económicas se modificaron en los últimos meses y propiciaron un fuerte crecimiento de los depósitos a plazo fijo en la primera quincena de julio: el precio del dólar se estabilizó, se redujeron las tasas de interés y se frenó la inflación. De esta manera, en los primera mitad del corriente mes se produjo un aumento de más de 2.400 millones de pesos en los plazos fijos, que implicó tanto a los depósitos privados como los públicos, y a los minoristas tanto como a los mayoristas.
Según un informe del Banco Central, de los 2.400 millones de pesos que crecieron los depósitos a plazo fijo en la primera quincena de julio, poco menos de la mitad -1.000 millones- corresponden a colocaciones del sector privado y el resto -1.400 millones- del sector público.
Por el lado de los depósitos del sector privado, el incremento de los plazos fijos se produjo por varios cambios de las últimas semanas, que rejerarquizaron el atractivo de esta modalidad.
Por un lado, la baja de las tasas de interés; por otro, la estabilidad del dólar, que dejó de crecer como ocurrió en el primer trimestre del año y, por último, un nivel de inflación que se mantuvo sin sobresaltos, a diferencia de lo que ocurrió entre enero y marzo.
Minoristas y mayoristas
Los depósitos a plazo tienen un rendimiento promedio de siete por ciento para los minoristas, mientras la tasa Badlar -que es la que pagan los grandes depósitos- se ubicó en torno al nueve por ciento anual.
De los 1.000 millones depositados por el sector privado, 240 millones correspondieron al sector mayorista -de más de un millón de pesos- a 30 días. De esta manera, quedó en claro que el aumento de los depósitos se produjo gracias a las colocaciones de los inversores minoristas.
Teniendo en cuenta los plazos, los depósitos de 90 a 179 días crecieron en 324 millones de pesos; hasta 59 días aumentaron en 239 millones y de 60 a 89 días, se expandieron en 201 millones de pesos. Los depósitos de 180 a 365 días se incrementaron en 180 millones.
Pero más de la mitad de los plazos fijos en pesos del sector privado son a corto plazo: 57% se pacta a menos de 60 días.
Por su parte, los plazos fijos en dólares se mantuvieron en 10.600 millones de dólares, entre los cuales el sector privado y público tienen casi la misma participación. La tasa que pagan esas colocaciones no supera el uno por ciento anual en promedio.
