ESCUCHARTal y como se viene realizando desde hace algunos días, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), la Policía de la Provincia y la Municipalidad de Córdoba, concretarán un nuevo operativo conjunto, esta vez incorporando a inspectores de la Policía Federal y la Aduana, que rastrillarán el micro centro de la ciudad, a fin de avanzar sobre la venta ilegal, la venta ambulante, el contrabando y la falsificación de marca.
En una inédita mesa de trabajo, que reunió al sector privado, funcionarios municipales y provinciales, así como las fuerzas de seguridad de la Provincia y la Nación, se acordó anoche lanzar un operativo denominado “pinza”, para responder a un viejo y reiterado reclamo de los distintos sectores que nucléa la Cámara de Comercio de Córdoba (CCC), quienes solicitaron, en más de una oportunidad, que se “respete a los comerciantes” que trabajan “en la legalidad y pagan los impuestos”.
El operativo, adelantado a Comercio y Justicia en la mañana de ayer, consistirá en un rastrillaje que incluirá el control de la procedencia de la mercadería que comercialicen los vendedores ambulantes, la decomisación de los productos y la remoción, por parte de la policía de la Provincia y funcionarios de Municipalidad, de los vendedores que se desempeñen en la ilegalidad.
“La semana pasada tuvimos una primera reunión en la que la Agencia Córdoba Turismo, la Cámara de Ferreteros, la de Ópticos, la de Hoteleros, la de Informáticos, de Joyeros, del Centro, la de Libreros, la CCC y la Fundación del Centro, nos explayamos sobre la problemática que vivimos como sector a partir de la venta ambulante, la venta ilegal, el comercio de productos de contrabando y la falsificación de marcas”, indicó a este medio el titular de la CCC, Mario Campisse.
“A partir de allí y de esta segunda reunión, es que se organizó este operativo conjunto para poder revertir esta situación que todos sabemos que no va a lograrse de un día para el otro”, explicó.
Por su parte, el subsecretario de Gobierno de la Municipalidad, Javier Alegre Capó, destacó la iniciativa articuladora de la CCC y la voluntad de trabajo conjunto de los distintos organismos, haciendo hincapié en que “sólo de manera mancomunada se pueden llegar a lograr efectos”.
En ese sentido, remarcó los progresos alcanzados en la labor realizada desde la Comuna en forma conjunta con la policía provincial en los controles “durante el día y en la noche, en bares y boliches”.
Sin embargo, reconoció la falta de recursos humanos, tecnológicos y económicos que afronta la Municipalidad para llevar a cabo operativos “más ambiciosos”.
“La coordinación y el ingenio pueden suplir la falta de recursos”, indicó el funcionario comunal.
Centro a cielo abierto
Respecto específicamente de la venta ambulante, la Municipalidad viene trabajando junto a la CCC en la relocalización de aquellos puestos que alguna vez contaron con una autorización comunal precaria.
La propuesta consiste en el traslado de los puestos a un “centro comercial a cielo abierto” ubicado en la zona de la plaza de la Intendencia.
“La idea es congregarlos en torno a una feria, tal y como la que funciona en el Mercado de las Pulgas que, en su momento, nadie valoró y hoy es un epicentro habilitado que funciona muy bien”,
