Alcanzaron $11.718 millones. Ese aumento es 20 puntos porcentuales inferior a la inflación y el menor en el año. Golpeó de lleno la baja de IVA y Ganancias resuelta por Macri, ahora cuestionada por la Corte a raíz del reclamo de los gobernadores. Los ingresos propios serían algo superiores. En cualquier caso, las cifras auguran meses complejos para el Gobierno provincial
Los envíos nacionales a la Provincia de Córdoba alcanzaron en octubre 11.718,9 millones de pesos, 34,2 por ciento por encima de los registrados en el mismo período del año pasado.
Se trata del menor incremento porcentual en lo que va del año, justo en momentos en que todas las jurisdicciones necesitan fortalecer sus recursos ante el creciente gasto, impulsado por la inflación.
La baja habría sido producto casi exclusivamente de los cambios en los impuestos al Valor Agregado (IVA) y a las Ganancias aplicados por el presidente Mauricio Macri luego de la derrota que sufrió en las PASO de agosto. Esos cambios, que implicaron la exención del IVA a determinados productos de la canasta básica y, en el caso de Ganancias, suba del mínimo no imponible y montos deducibles, fueron cuestionadas por la mayoría de las provincias por entender que impactaba sobre la recaudación de impuestos coparticipables.
De hecho, 15 distritos accionaron ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que muy pronto falló a favor de la pretensión de los gobernadores para que se les restituyeran esos recursos.
El Gobierno nacional debió allanarse en los últimos días y publicó una planilla con los fondos que les serían devueltos a las provincias que iniciaron demandas, con retroactividad, entre las que no estaba Córdoba.
Con todo y tal como anticipó Comercio y Justicia, el Gobierno nacional prometió un decreto que generalice la restitución, que aún no fue publicado.
Sin embargo, los gobiernos provinciales se quejaron por el magro monto calculado por la Nación como compensación y volvieron a la carga para que recalcule las partidas, particularmente vinculadas al impuesto a las Ganancias.
De hecho, este medio anticipó en su edición de ayer que el tema había sido tratado el miércoles en una reunión de ministros de Economía, de la que también participó el titular de la cartera de Finanzas de Córdoba, Osvaldo Giordano.
En el caso de la Provincia, además del pago de unos 500 millones de pesos producto del retroactivo del IVA a agosto y de un cálculo hasta enero inclusive, también deberían sumarse unos 3.500 millones de pesos más por Ganancias.
Como fuere y mientras las provincias tramitan esos pagos, octubre mostró por primera vez, de manera contundente, el verdadero impacto en la coparticipación de aquellas medidas tomadas por Macri sobre IVA y Ganancias. Seguramente cuando en las próximas horas la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) informe los datos de la recaudación nacional, también se podrán observar los efectos. De esta forma, computados los diez primeros meses del año, los giros nacionales a Córdoba totalizan 108.131,9 millones de pesos, 39,64 por ciento mayores que los de un año atrás, también muy lejos de la suba de precios en el mismo período.
La defección de los envíos nacionales a Córdoba es una preocupación extra en un contexto en el que la crisis económica golpea fuertemente los ingresos mientras el Gobierno provincial busca contener el gasto. En principio, la recaudación propia de la Provincia habría tenido un desempeño levemente superior al registrado por los giros nacionales, aunque también debajo de la inflación. La caída de los ingresos en términos reales ya acumula más de un año.
En ese marco, la administración de Juan Schiaretti buscó contrarrestar con una férrea política de control de las erogaciones.
En primer término, aplicó desde hace tiempo una baja en la ejecución de obras públicas. De hecho, hasta agosto inclusive -último dato oficial disponible-, las partidas erogadas en bienes de capital, básicamente obras, habían registrado una baja de 2,66 por ciento. A valores constantes, implica una drástica caída en la comparación interanual.
Además de ese freno, el Gobierno provincial avanzó con otro cambio clave: suspendió la aplicación de la cláusula gatillo que indexaba por inflación los salarios de los empleados públicos.
Esa decisión implicará un importante freno de esas erogaciones que, hasta agosto inclusive, cuando todavía regía la aplicación del gatillo, subían a 43,48% interanual, por encima de los ingresos totales, que lo hacían a 40,62%.
De hecho ya en septiembre, cuando se debería haber aplicado un aumento en los salarios de 3,98% producto de la inflación de agosto, el Gobierno acordó con los gremios estatales desactivar ese incremento y, por el contrario, otorgar una suma fija de 1.400 pesos para septiembre y 1.600 pesos para octubre, monto éste que se cobrará desde hoy en el inicio del cronograma de pagos a los activos. Ayer, en tanto, cobraron con aumento los jubilados, aunque una cifra levemente inferior.
En ese contexto y aunque las partes aún no se reunieron nuevamente, es un hecho que el Gobierno provincial volverá a proponer extender los pagos de suma fija, quizá con algún porcentaje como para sumar a la base salarial.
Los gremios reclamarán una propuesta que se acerque a la inflación, que en septiembre fue récord en el último año y que en octubre, aunque aún no se conoce el dato oficial, volverá a mostrar números elevados.
Como fuere, a tenor de la caída de la recaudación, la administración Schiaretti insistirá en que no hay condiciones para poder afrontar incrementos salariales que permitan mantener el poder adquisitivo del salario.
Ajustada la obra pública y las erogaciones salariales, no hay mayor margen para revisar otros costos, particularmente las partidas destinadas a cubrir inversiones sociales, en momentos de plena crisis y con una pobreza creciente.