Envíos a Córdoba mejoraron en julio pero sin asistencia extra, los números no cierran

LLegaron a $14.008,8 millones, 20,82% superiores a igual mes del año pasado. El aumento, aunque muy superior al del mes pasado, aún está 20 puntos debajo de la inflación. En ese contexto, la Provincia espera que Nación mantenga giros por ATN y no descarta nuevo crédito del FFDP. Mientras, sigue con freno a la obra pública Los envíos nacionales a la Provincia de Córdoba alcanzaron en julio pasado a 14.008,8 millones de pesos, 20,82 por ciento por encima del monto girado en igual mes del año anterior.[privado] El aumento porcentual, aunque más del doble que el 9,06 por ciento registrado en el mes pasado, es sin embargo la mitad de la inflación que se estima para julio pasado en la comparación interanual. Ese último dato recién estará disponible la semana próxima. No obstante, ya en junio, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Córdoba fue de 40,11 por ciento respecto a 2019. Se estima que en julio y en relación a igual mes del año pasado, probablemente se ubique ya debajo de 40 por ciento. Como fuere, el dinero que envía la Nación como parte de las transferencias automáticas a Córdoba, sigue muy por debajo de las expectativas previas a la pandemia y de hecho reflejadas en el Presupuesto 2020. En el acumulado de los primeros siete meses del año, los giros acumulan 90.869,9 millones de pesos, 23,3 por ciento por encima de 2019, también muy por debajo de la inflación. Nada indica que esos recursos que explican seis de cada 10 pesos que ingresan a Córdoba como recursos corrientes, vayan a mejorar o al menos equiparar a los precios, al menos en el próximo trimestre. En ese contexto y con una recaudación propia que si bien mejoró levemente, todavía está debajo de la inflación, Córdoba volverá a necesitar recursos de emergencia para poder mantener en funcionamiento el Estado y atender todas las necesidades corrientes y también las de capital. La más acuciante en este instancia es la salarial. La semana próxima, concretamente el 14 de agosto, el Gobierno pagará el aumento salarial de 5 por ciento a los agentes estatales, el último de una paritaria acordada en febrero y escalonada en tres veces. Aquel acuerdo se cerró en febrero, días antes de que se dispusiera la cuarentena y que la crisis se profundizara aún más luego de ya dos años de recesión. Como fuere, el Gobierno lo pagará recién a mediados de mes -no con los sueldos de julio como debió hacerse originalmente- y exigirá una erogación extra de casi 500 millones de pesos. Así, el costo salarial de los trabajadores activos rozará los 11 mil millones de pesos. Ya no habrá nuevas paritarias hasta octubre. En todo caso, recién entonces se verá sí hay otro aumento, en función de la evolución de las cuentas públicas y también de la inflación que por ahora luce contenida, con tarifas congeladas y precios quietos por la fuerte recesión. Por ahora, con un dólar oficial con el freno de mano -en rigor con microdevaluaciones-, tampoco por esa vía hay una presión hacia los precios, al menos inminente y pese a la enorme brecha con los dólares financieros o el dólar informal. El gasto salarial más la cobertura del rojo que la Caja de Jubilaciones que no financia el Gobierno nacional, sumado a otros gastos ineludibles tanto corrientes como de capital, son cubiertos con lo justo. La referencia incluye los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) que, según Nación, llegaron a 4.046 millones de pesos. Esos fondos no se reflejan de manera contable como coparticipación pero sí como otros ingresos corrientes. En cualquier caso, son recursos extras que ayudan a sostener el delicado equilibrio presupuestario que por lo menos regía hasta mayo, según los últimos datos oficiales. Además, fue clave la llegada de otros 4.800 millones de pesos del crédito del Fondo Fiduciario de Desarrollo Provincial (FFDP) que gestionó la Provincia y que luego deberá devolver en 36 cuotas atadas al Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER) como tasa pactada. Todos esos recursos extraordinarios sumado al bono por hasta 9 mil millones de pesos con que el Gobierno provincial pagará deudas con proveedores y contratistas, son hoy claves para sostener la marcha de la Provincia. En ese marco, el Ejecutivo espera que la ayuda nacional extra se mantenga en el tiempo. Por lo pronto, la ampliación presupuestaria que se votará mañana en Diputados -media sanción-, incluye 50 mil millones de pesos más para el FFDP. Córdoba podría volver a gestionar otro crédito similar al ya tomado. Igual, tendrá que devolverlo. En paralelo, quedaron confirmados los 9.500 millones de pesos de subsidios para el transporte del interior del país. Los fondos no alcanzan pero al menos es un avance respecto a la nula partida que se proyectó originalmente cuando se envió ese proyecto de ampliación al Congreso. En conclusión y pese al achique del gasto -incluido el ajuste previsional-, los ingresos siguen sin alcanzan y salvo que la economía repunte, la ayuda extra deberá seguir llegando. Más aún si se contabiliza que la Provincia seguirá por ahora pagando la deuda en dólares bajo ley extranjera y legislación local, a la espera que la Nación termine de negociar con los bonistas. Tal como señaló Comercio y Justicia la semana pasada, en apenas siete días, Córdoba debió atender dos pagos de vencimientos por casi 30 millones de dólares. En tanto, en menos de 30 días deberá pagar otro por 19 millones de dólares. Urge un acuerdo con los bonistas para frenar ese grifo que será insostenible si la recaudación no mejora. Superávit en 2019, según Iaraf Según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), las provincias argentinas mantuvieron superávit primario en 2019, aunque con gran dispersión. Pese a una caída en su actividad económica del 2,1% y una inflación minorista promedio del 53,5%, las provincias en su conjunto, habrían mantenido el resultado primario positivo que alcanzaron en 2018, reduciéndolo a la mitad si se lo mide en relación al PIB (0,4% a 0,2%). Tomando el ratio Resultado primario / Recursos totales para cada provincia, se aprecia que diez distritos habrían logrado mejorar su resultado respecto al 2018, entre ellas Córdoba, La Rioja, Jujuy, Santiago del Estero, Santa Cruz, Corrientes, Tierra del Fuego, Buenos Aires, Chaco y Formosa. Las tres de mayor deterioro fueron San Luis, Tucumán y Chubut. [/privado]

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