La instalación de equipos de Gas Natural Comprimido (GNC) en agosto alcanzó 1.444 operaciones en Córdoba, la mitad de las 2.701 registradas en el mismo mes del año pasado.
Esa cifra es la menor en los últimos tres años, según datos del Enargas a los que tuvo acceso Comercio y Justicia.
En paralelo, fue levemente inferior a la registrada en el mes inmediato anterior.
A raíz de la cuarentena estricta dispuesta por el Gobierno nacional a partir del 20 de marzo pasado, la conversión de vehículos a GNC mostró en abril el peor registro histórico: apenas alcanzó 283 operaciones. Luego comenzó a recuperarse conforme la flexibilización de la normativa, aunque esa mejora se detuvo en agosto.
En cuanto al parque móvil equipado con GNC, llegó a 274.777 unidades, apenas por encima del piso registrado en mayo, cuando alcanzó 273.255 vehículos.
Sin embargo, si la cifra se compara con las 297.042 unidades de enero último, la caída alcanza casi 25 mil autos, número que marca el impacto de la crisis en el sector.
Por lo demás, la brecha entre el valor del GNC y el de los combustibles líquidos volvió a subir levemente en los últimos días luego del incremento en el precio de las naftas, que no se correspondió con movimiento alguno en el caso del gas.
Ese aumento de la diferencia entre uno y otro combustible generalmente implica una mayor demanda de equipos del GNC, que en todo caso sólo se verá en las estadísticas de septiembre.