El Gobierno lanzaría esta semana el plan para reactivar la industria automotriz, junto con el otorgamiento de subsidios para facilitar la compra de artículos del hogar, según revelaron voceros oficiales.
La presidenta Cristina Fernández, la flamante ministra de la Producción, Débora Giorgi, y el secretario de Industria, Fernando Fraguío, se reunirían hoy en la residencia de Olivos para terminar el plan de reactivación junto a representantes del sector automotor.
El anuncio podría realizarse hoy mismo o mañana, demorándose para que Giorgi pueda definir los últimos detalles de los anuncios.
Según parece, el Gobierno apunta a que el auto más barato que comercializa cada terminal tenga una rebaja de entre el 15 y el 20%, y que las fábricas y las concesionarias absorban los menores ingresos.
Habría quedado descartada la producción de autos económicos por oposición de las automotrices, según la idea que impulsaba el secretario de Comercio, Guillermo Moreno. También trascendió que se estudia implementar un plan de financiamiento a tasa cero para agilizar la venta de autos nuevos, financiado con fondos del flamante Sistema Integrado Previsional (SIPA), y tendrían la forma de fideicomisos.
Para otorgar el crédito no importaría el origen del automóvil y serviría para comprar autos fabricados en el país o importados desde Brasil.
Giorgi se reunió durante el fin de semana con Fraguío y el resto del equipo de Industria para avanzar en los detalles. En el encuentro, se habría resuelto dejar de lado la propuesta del secretario de Comercio, quien quería que las automotrices realizaran versiones más básicas para venderlas más baratas.
Por otra parte y para sumar al plan de reactivación del consumo, trascendió que se estudia otorgar un subsidio estatal a fin que la gente cambie “su heladera vieja y otros artículos de última generación”, lo que al mismo tiempo serviría para reducir el consumo eléctrico.