Desocupación en pandemia: Argentina comenzó 2021 con la séptima tasa más alta de la región

El indicador en el país creció por debajo del promedio, si se consideran los datos de 2019. En América Latina y el Caribe preocupa el retroceso en la formalización del empleo

En el marco de la crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus y las medidas de aislamiento tomadas por los distintos gobiernos para contener el avance de los contagios, el empleo se vio afectado en toda la región, tal como lo demuestran los datos correspondientes a 2020. [privado]

En este sentido, al finalizar el año pasado y comenzar 2021, Argentina se ubicó séptima entre las economías de América Latina y el Caribe que mayor tasa de desempleo registraron, aunque en la comparación con 2019 fue uno de los países donde la desocupación se incrementó menos que el promedio regional.

Los datos surgen de un informe presentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que -sobre la base de registros de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) hechos con base en las estadísticas de cada país - precisó aspectos relevantes de la coyuntura del empleo en esta parte del globo.

Al difundir el documento, la entidad indicó que el mayor impacto de la pandemia en el mundo del trabajo se registró en el segundo trimestre del año pasado, cuando fueron más profundas las restricciones a la actividad y la circulación de las personas.

“Muchos trabajadores, principalmente informales, no pudieron continuar con sus labores productivas y debieron retirarse del mercado, lo que les impidió generar ingresos para sus hogares y actuar en forma contracíclica como en crisis anteriores”, ratificó la organización que conduce Alicia Bárcena, y agregó que “el cierre de los servicios de cuidado y de las escuelas implicó una fuerte carga de trabajo al interior de los hogares, que en general se reparte desequilibradamente sobrecargando especialmente a las mujeres”.

Aunque a partir de julio de 2020 en toda la región se observó una mejora en el mercado laboral, el año pasado finalizó con una ocupación bastante inferior a la de la prepandemia en la mayoría de los países.

Escenario

Así, 2021 enfrenta un escenario complejo debido a la segunda ola de contagios y a la necesidad de que los gobiernos “implementen políticas que estimulen la generación de empleos, particularmente en los grupos más vulnerables, como los jóvenes y las mujeres”, según indicó Bárcena.

Por rubros y en consonancia con otros estudios, los datos de la Cepal confirman que la contracción de los puestos de trabajo durante el año pasado fue más severa en Hotelería (con una caída de 19,2%), Construcción (11,7%), Comercio (10,8%) y Transporte (9,2%).

Análisis

Tomando los datos anexos correspondientes al informe “Coyuntura Laboral en América Latina y el Caribe” de la Cepal, Comercio y Justicia realizó una comparación relativa al comportamiento de la tasa de desocupación en toda la región.

Así, pudo observarse que en 2020, las diez economías en las que mayor tasa de desempleo se observó fueron Costa Rica (19,50%), Panamá (18,50%), Santa Lucía (17,69%), Colombia (16,10%), Belice (13,70%), Brasil (13,50%), Argentina (11,60%), Honduras (10,90%), Chile (10,70%) y Uruguay (10,30%).

En tanto, si sólo se contemplan los países de América del Sur, Argentina se encuentra tercera entre las naciones que registraron tasas más altas durante el año pasado. Vale señalar que el promedio regional se ubicó -siempre según estos datos- en 10,50%.

Por otro lado, si se compara con los índices de 2019, es decir, previo al covid-19, en toda la región la situación de la desocupación creció 2,1 puntos porcentuales (pp), pues antes se ubicaba en 8,40%. En el caso de Argentina, la suba fue de 1,8 pp, con una tasa previa de 9,80%.

En este sentido, las naciones donde más incidió la crisis económica consecuente del coronavirus en materia de empleo fueron Panamá, Costa Rica, Colombia, Honduras, Ecuador, Chile, Perú, Belice, Bolivia y Jamaica.

Al respecto de esta situación generalizada, el documento de la Cepal advirtió: “Durante 2021 los países de la región convivirán con tasas de desocupación más altas que las observadas antes del inicio de la pandemia, así como con la generación mayoritaria de empleos informales”, por lo cual “resulta primordial pensar en estrategias que permitan sentar las bases para un retorno con mejores condiciones laborales para todos los trabajadores”.

En tanto, resulta de particular atención la destrucción de puestos formales y la consecuente generación de espacios “mayoritariamente en el sector informal”, lo cual representa “un gran reto tanto para las políticas como para las instituciones laborales, puesto que los avances de los procesos de formalización del empleo observados en las últimas décadas pueden revertirse en el corto” plazo. [/privado]