Con una reducida presencia de productores y sin cortes en las rutas, ayer se cumplió el tercer día del quinto paro agropecuario de 2008. En ese marco, los ruralistas volvieron a reclamar una etapa de diálogo e información detallada acerca de las medidas que el Gobierno anunciaría el jueves.
Mientras en las anteriores huelgas hubo centenares de asambleas de productores en distintos puntos del país, durante el fin de semana las manifestaciones fueron escasas y contaron con poca concurrencia.
De todas maneras, el dirigente de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo de Ángeli, advirtió que a partir de hoy “se agudizará la protesta del campo contra el Gobierno porque la gente tiene bronca, está muy mal y quiere cortar las rutas”.
Por su parte, el secretario de Agricultura, Carlos Cheppi, evaluó que “no hay mucho apoyo” a la medida tras anunciar que en los próximos días lanzarán un plan en el que trabajan “desde hace rato”.
La propuesta oficial, que sería anunciada por la presidenta Cristina Fernández, fijaría un precio para el litro de leche y establecería por licitación el otorgamiento de la Cuota Hilton. El anuncio se realizaría después del miércoles, una vez finalizada la medida de fuerza a la que Ricardo Echegaray, titular del Oncca, calificó de “lamentable”.
Respecto de los anuncios, el vicepresidente de CRA, Néstor Roulet, afirmó que “es bienvenida” cualquier medida que tienda a aliviar a los productores, pero aclaró que eso es así “siempre y cuando no distorsione los mercados”.
Por su parte, Hugo Biolcatti, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), advirtió sobre las dificultades que tiene el campo para conseguir respuestas por partes de las autoridades, y señaló que aun después de los seis días de paro que llevará a cabo el sector, “nadie piensa que se conseguirá el manual del tambero feliz”.
En tanto, el escaso apoyo a esta nueva medida de fuerza del sector trascendió a partir de algunas encuestas que, a lo largo del país, evaluaron la adhesión (ver Contratapa).
La protesta iniciada el viernes se extenderá hasta el miércoles y culminará con una concentración en la ciudad bonaerense de San Pedro, y luego habrá una marcha con un abrazo simbólico al Congreso.