El Ejecutivo provincial accedió a modificar la forma de percepción del impuesto al juego destinado a conformar un Fondo para la Asistencia e Inclusión Social, aunque no habrá cambios en el tributo que para el caso de tragamonedas y juegos de paño electrónicos se mantendrá en el cinco por ciento.
En tanto, fuentes del Ejecutivo aseguraron a Comercio y Justicia que no habrá renegociación de contrato con la Compañía de Entretenimientos y Turismo (CET), subsidiaria del Grupo Roggio que, tal como lo anticipó ayer este medio, buscaría rediscutir el vínculo contractual a raíz de las consecuencias de la aplicación del tributo sobre los ingresos de la concesionaria.
“No hay posibilidad de renegociar por las consecuencias del impuesto sobre la facturación de la empresa”, indicó el informante con despacho en Casa de Gobierno.
No obstante, la fuente no descartó ampliar el parque de tragamonedas “a solicitud de los municipios”, aunque aclaró que se trata de otro tipo de situación, no emparentada al pedido de CET.
En cuanto a los cambios en el tributo, en rigor se circunscriben a una cuestión de forma toda vez que aún no está disponible el software que se pretende utilizar para que las tragamonedas o, por caso, la ruleta electrónica puedan debitar directamente los premios al momento de la obtención por parte del apostador.
“Van a actuar como agentes de retención y deberán rendir lo producido por el tributo de manera periódica”, señaló Dante Heredia.
Pocos cambios
Por lo demás, el proyecto de Presupuesto, Código Tributario y Ley Impositiva que se sancionará hoy no tendrá mayores cambios respecto al proyecto enviado por el Ejecutivo a la Legislatura.
“Se mantienen en general las alícuotas y todos los cambios presentados por el Ejecutivo”, indicó Heredia.
En ese sentido, se desechó el planteo del Colegio de Escribanos que habían planteado la posibilidad de eximiciones para operaciones con viviendas de hasta 120 metros cuadrados.
Por el contrario, habrá cambios en el Presupuesto y puntuamente en una partida de 1,8 millones de pesos afectada a la Secretaría de Deportes que ahora irá a asistir a clubes con problemas financieros y chances de subasta.
También se eliminará un artículo del proyecto de Presupuesto que dotaba de facultades a ministros y secretarios de Estado a efectuar compras directas que ahora sólo serán potestad del Ejecutivo.
También hay leves modificaciones a la ley 9024 de Ejecución fiscal.
Finalmente, se analizaba anoche la posibilidad de eximir al menos parcialmente del impuesto a los Ingresos Brutos a las clínicas y sanatorios.
Puntualmente, la alternativa que se estudiaba en el despacho del ministro de Finanzas, Angel Elettore, apuntaba a eximir a aquellas prestaciones vinculadas con la Administración Provincial del Seguro de Salud (Apross).
“Es un sector castigado y que nos consta tiene problemas”, admitió una fuente del Ejecutivo.
Las entidades que nuclean a las clínicas y sanatorios habían solicitado en audiencia pública la semana pasada que se las eximiera del impuesto a los Ingresos Brutos y además del Inmobiliario para el caso de los edificios afectados a las prestaciones de salud, según consignaron quienes asistieron a la audiencia en representación del sector.