La demanda creciente de alimentos no es una realidad que ocurre sólo en el resto del mundo; en el país y en la ciudad de Córdoba ocurre a diario y la tendencia respecto de la preferencia por lo natural es algo que, según los entendidos, “llegó para quedarse”.
Con la mirada en en ese horizonte, la Agencia para el Desarrollo Económico de la Ciudad de Córdoba (ADEC) inició un estudio sobre las eventualidades a escala global con el objeto de influir sobre la decisión de las inversiones públicas y privadas. En ese marco, el miércoles pasado presentó los resultados del primer Estudio de Mercado para Identificar Oportunidades de Subproductos Vegetales Provenientes del Cinturón Verde de Córdoba para la Industria Alimenticia, Farmacéutica y otros.
Ese trabajo concluye que el sector fabril está expectante respecto de la inclusión de mayor cantidad de insumos y subproductos naturales, de acuerdo con las exigencias del consumidor y su disposición a pagar un extra por los beneficios asociados.
No obstante, también se reveló que la industria ya tiene resuelta la provisión de los insumos y subproductos naturales que compra, con lo cual será necesario que los nuevos proveedores de productos concretos demuestren las propiedades y beneficios que se ofrecen.
“El riesgo para la industria debe ser bajo”, destacó el informe de la ADEC en el que, además, se hizo manifiesta la situación de tensión entre la oferta (cinturón verde) y la demanda (la industria de la alimentación y de farmacias) “dada la asignación del riesgo a la otra parte”.
“Para que este círculo tenga virtuosismo, los organismos gubernamentales deberían intervenir con fuerza. La industria espera esta política” de parte del Estado, indicó el informe.
Por ello, la institución subrayó como fundamental y necesaria “una actitud proactiva del sector público” a fin de garantizar, “al menos, procesamientos de baja complejidad”.
Prospectiva
El estudio de mercado se enmarca en el Programa de Desarrollo Territorial en el Área Metropolitana de Córdoba que la ADEC ha iniciado en junio pasado, con vistas a convertirlo en el insumo fundamental en el cual puedan basarse quienes estén interesados en realizar inversiones.
“Lo que estamos haciendo es tratar de que nuestro territorio vaya descubriendo cuáles son las tendencias a nievel global para que adaptemos las inversiones en desarrollo hacia ese futuro”, explicaba días atrás a Comercio y Justicia Gustavo Viano, vicepresidente primero de la ADEC, respecto del estudio de prospectiva en Córdoba.
Buscando oportunidades
En el caso puntual del cinturón verde de la ciudad, la ADEC estudió las tendencias en materia de manufactura y consumo de alimentos y bebidas y los obstáculos y/o facilitadores para la implementación de mayor cantidad de subproductos naturales. Para ello se entrevistó a representantes de más de 30 firmas de las industrias de la alimentación y farmacéutica, de cuyos encuentros surgió la evidencia de que el productor de variedades tiene limitaciones para la generación de insumos y subproductos naturales.
Asimismo, se comprobó que el cinturón verde local no tiene un posicionamiento claro como sí lo tienen en otras zonas del país (Tucumán con los cítricos, por ejemplo).
“Verduras deshidratadas, pulpas y algunas especias son tratamientos de baja complejidad con mayor oportunidad a desarrollarse. El mercado de comida al plato y congelados es un sector con demanda latente”, señaló el texto.
A su tiempo, los extractos medicinales, vinagres especiales, caroteno, extracto de clorofila, proteína vegetal, subproductos del maíz y pigmento y azúcar de remolacha son tratamientos de alta complejidad que se visualizan con oportunidades a desarrollarse, siendo mercados potenciales la medicina y la cosmética fitoterapéutica.
El informe señala, además, que las hojas verdes, la granada, el durazno y el maíz fueron las variedades a las que más valor de uso inminente le percibieron las industrias entrevistadas.