La producción de autos creció 39,6% en mayo respecto al mismo mes de 2009, y 4,6% en comparación con abril, pero el sector advirtió que podría encontrar “cuellos de botella” para seguir expandiéndose por el “bajo ritmo de suba de la actividad del autopartismo” que abastece las terminales.
La preocupación está ganando terreno en las plantas que las automotrices tienen distribuidas entre Buenos Aires y Córdoba, dado que el sector no crece al mismo ritmo que la producción y eso podría provocar serios inconvenientes u obligar a importar, lo que encarecería los precios de los autos, se dijo.
El presidente de la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa), César Luis Ramírez Rojas, dijo que los objetivos de mantener la tendencia actual para alcanzar las metas proyectadas para 2010 podrían verse comprometidos por “cuellos de botella” que ya comienzan a registrarse en el sector.
Las proyecciones de Adefa indican que las terminales podrían alcanzar un volumen de producción de 670.000 unidades este año, en contraste con las 512.924 de 2009 y muy por encima de la marca histórica de 610.781 que se logró en 2008, siempre y cuando no haya problemas con el abastecimiento.
Ramírez Rojas sostuvo que al actual ritmo de producción, los proveedores están trabajando “cerca del límite” de su capacidad instalada y subrayó que hay “escasos” proyectos de inversión y ampliación anunciados.
Esta situación “no permite prever que las autopartes locales puedan satisfacer en el corto y mediano plazo la creciente demanda”, dijo.