Alberto Fernández promulgó la movilidad previsional e insistió en que mejorará los haberes

Admitió que no cree que “ningún jubilado esté muy bien con sus ingresos”. Sin embargo, consideró que el nuevo esquema les va a permitir estar “un poco mejor”. En tanto, la titular de Anses, recordó que este año, los haberes subieron 35,3%.

El presidente Alberto Fernández admitió “no creer que ningún jubilado esté muy bien con los ingresos que tienen", aunque remarcó que la nueva movilidad jubilatoria les va a permitir estar "un poco mejor". [privado]

El jefe de Estado habló ayer en Chapadmalal en un acto en el que promulgó la Ley de Movilidad Previsional, votada la semana pasada por el Congreso.

Compartió el evento con la titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social Anses, María Fernanda Raverta, y con el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.

En ese marco, Raverta afirmó que 2021 será “el año de la reconstrucción de la Argentina” y, en ese marco, resaltó la importancia de la “nueva fórmula de movilidad jubilatoria".

“En 2021 es necesaria una nueva agenda que recupere cuestiones estructurales” y que la nueva fórmula jubilatoria permitirá que más de 7,2 millones de jubilados y pensionados salgan de "la discrecionalidad, y con la previsibilidad de un aumento trimestral”, indicó la funcionaria.

“Este año alcanzamos un 35,3% de aumento por decreto, lo que representó mejores aumentos que en cualquier actividad de cualquier sector de trabajadores activos”, subrayó.

Dijo también que es necesaria la certeza de “una fórmula que permita que el crecimiento de la economía acompañe al crecimiento de los jubilados”.

La titular de la Anses sostuvo que es preciso “dejar atrás el 2020, el año de la pandemia”, y apostar a esta nueva agenda que permita asistir a los jubilados y pensionados, así como también a más de 4,2 millones de niños, mediante la asignación universal.

Luego de repasar la inversión del Estado para paliar los efectos de la pandemia, Raverta recordó que “sólo en Anses se realizó una inversión de más de 600 mil millones de pesos en concepto de transferencia directa” con el objetivo de poder amortiguar el impacto de la pandemia.

Los principales puntos

La Ley de Movilidad Jubilatoria promulgada por Fernández establece que los haberes de la clase pasiva se actualizarán desde marzo con una fórmula que combina el crecimiento de la recaudación de la Anses y de los salarios.

Esa fórmula se aplicará a las jubilaciones, pensiones, pensiones no contributivas, asignaciones familiares, la Asignación Universal por Hijo y la Pensión Universal del Adulto Mayor (PUAM).

De acuerdo con la ley, los haberes de la clase pasiva y asignaciones sociales se actualizarán con un índice que combina en 50 por ciento el crecimiento de la recaudación y 50 por ciento de los salarios por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y la Remuneración Imponible de Trabajadores Estables (Ripte).

Los aumentos se aplicarán en marzo, junio, septiembre y diciembre.

Respecto a la fórmula de movilidad, se aplicará un índice que combina un 50 por ciento de la evolución de los salarios del Indec y de la Ripte de Seguridad Social y un cincuenta por ciento de la recaudación tributaria de la Anses.

En ningún caso la aplicación de dicho índice podrá producir la disminución del haber que percibe el beneficiario.

Paralelamente, Anses elaborará y aprobará el índice trimestral de la movilidad y realizará su posterior publicación.

La norma faculta al Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social para que, en forma conjunta con el Ministerio de Economía y la Anses, en el ámbito de sus respectivas competencias, dicten las normas aclaratorias y complementarias.

Impacto

Precisamente, el verdadero efecto que tendrá la aplicación de la nueva fórmula de movilidad sobre los haberes de los pasivos es el eje de las principales controversias sobre el esquema.

Sucede que el mecanismo votado por la nueva ley, dejó afuera a la inflación como variable de cálculo, a diferencia de la fórmula que rigió desde 2017, impulsada por el entonces presidente Mauricio Macri, duramente criticada por la entonces oposición, por considerar que llevaría a un deterioro de los haberes de los jubilados.

Es justamente ese argumento el que ahora impulsó la oposición de Juntos por el Cambio, para rechazar la nueva movilidad.

En rigor, en un país con fuerte impronta inflacionaria, quitar a esa variable de una fórmula de movilidad previsional es eliminar un reaseguro de que al menos las jubilaciones no cedan mucho terreno respecto a la suba de precios.

De hecho, si bien el Presupuesto 2021 prevé un índice de precios de 29 por ciento, hay consenso en que la inflación será mayor a esa referencia, incluso por encima de 40 por ciento en función de las subas de tarifas pendientes. [/privado]