La Cámara de Inmobiliarias Rurales dijo que el escaso interés se debe a la presión impositiva, a la incertidumbre ante las elecciones y a que el mercado financiero ofrece rentas más “tentadoras”
La Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR) informó que en el primer semestre del año se registró una baja actividad en el mercado de compraventa de campos, con “escaso” interés de parte de la demanda, en tanto que para el segundo semestre prevé “un lento, pero continuo crecimiento” en el mercado del sector.
Las apreciaciones fueron divulgadas a la prensa luego de que la entidad relevó el mercado inmobiliario agrícola entre enero-junio, y concluyó que el sector “continúa con un desarrollo caracterizado por la baja actividad”.
“Las escasas operaciones que se registran, en general, son de valores inferiores a lo que suele ser el promedio habitual en el mercado y no se observa un interés sostenido de la demanda”, indicó la cámara.
Asimismo, señaló que las áreas más buscadas siguen siendo las mejores zonas agrícolas, donde los valores se mantienen firmes y resulta “difícil encontrar alternativas para los potenciales inversores”.
En tanto, indicó que en el resto de las regiones del país, las operaciones son “más infrecuentes aún”.
Al esbozar explicaciones, mencionaron, entre otras, la existencia de una alta presión impositiva, un blanqueo que no se volcó a la inversión en campos y una “sensación de incertidumbre” en razón de las próximas elecciones legislativas.
También remarcaron que el mercado financiero, “con sus altas rentas en dólares, resulta demasiado tentador para distraer a los inversionistas en una actividad cuya renta es baja, su liquidez es de relativa a baja y su riesgo está siempre presente”.
No obstante, destacó que “la actividad ganadera parecería estar en un proceso de recuperación, ya que se registran retenciones de vientres y un general optimismo en el mediano plazo en el sector”.
Alquileres
En lo referente a los arrendamientos, la cámara indicó que la búsqueda de campos agrícolas, en aquellas zonas que no han sido afectadas por las inclemencias climáticas, es firme y los valores tienden a mantenerse o a mostrar una tendencia a moderadas alzas.
En cuanto a los campos ganaderos, la entidad mencionó que “también hay una demanda sostenida con valores que se mantienen estables en general”.
A pesar de los inconvenientes, la CAIR reveló que en el sector se registra “mayor cantidad de visitas a los campos con potenciales clientes, y una mayor incorporación de ofertas en las carteras de los colegas”.