ESCUCHAR“Salud para todos” es el lema elegido por la OMS para el 75° Día Mundial de la Salud que se conmemora el 7 de abril. El 30% de la población mundial no puede acceder a servicios de salud esenciales. Hacia 2030 se prevé un déficit de 10 millones de trabajadores de la salud en todo el mundo.
El derecho a la salud es un derecho humano básico. Todas las personas deberían tener acceso a los servicios de salud que necesiten, cuando y donde los necesiten; pero esta es una meta que en muchos países aún no se cumple.
De acuerdo a los datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de “2 mil millones de personas se enfrentan a gastos sanitarios catastróficos o empobrecedores”, lo cual refuerza las desigualdades que afectan a quienes se encuentran en los entornos más vulnerables.
Según la OMS los sistemas de salud impulsados por un enfoque de atención primaria de salud (APS) “son la forma más eficaz para acercar los servicios de salud y bienestar a las personas”.
La pandemia de “COVID-19 y otras emergencias de salud, las crisis humanitarias y climáticas superpuestas, las limitaciones económicas y la guerra han hecho más urgente el avance de todos los países hacia el objetivo de “Salud para todos”. Según la OMS “ha llegado el momento de que los líderes tomen medidas para cumplir sus compromisos en materia de cobertura sanitaria universal y de que la sociedad civil les exija que rindan cuentas”.
La Salud post pandemia reveló además las profundas desigualdades que atraviesa al sector. De acuerdo a un reporte de la Cepal las mujeres de la región fueron parte crucial “de la primera línea de respuesta a la pandemia”. “Un 73,2% de las personas empleadas en el sector de la salud son mujeres, quienes han tenido que enfrentar una serie de condiciones de trabajo extremas, como extensas jornadas laborales, que se suman al mayor riesgo al que se expone el personal de la salud de contagiarse del virus”, explicaron desde la Cepal..
“Todo esto en un contexto regional en el que persiste la discriminación salarial, pues los ingresos laborales de las mujeres que trabajan en el ámbito de la salud son un 23,7% inferiores a los de los hombres del mismo sector”, señaló Alicia Bárcena, referente del organismo.
Desde la OMS plantean como urgente la necesidad de “aumentar la financiación pública para la salud y reducir los gastos directos en salud” promoviendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible más allá del ámbito de la salud. En esta línea, en el marco del 7 de abril, remarcaron que es necesario invertir en educación y creación de empleo para el sector. “Entre 2023 y 2030 se prevé un déficit de 10 millones de trabajadores de la salud en todo el mundo”, señalaron desde dicho organismo y remarcaron que el 30% de la población mundial aún no cuenta con acceso a los servicios de salud básicos.
