La Justicia laboral convalidó el despido de una ex empleada de Falabella SA motivado por pérdida de confianza, al comprobarse mediante la grabación fílmica de seguridad que la dependiente intentaba apropiarse de un perfume de la empresa sin abonarlo.
Esta decisión fue adoptada por la Sala 2ª, integrada por Miguel Ángel Azar, en el marco del pleito protagonizado por Mónica Del Valle Figueroa Schmidt, quien fue cesanteada por encontrarla culpable de haber intentado llevarse escondido entre su vestimenta una fragancia importada, que era propiedad del local comercial, circunstancia que fue detectada al trasponer el sistema de seguridad.
Probado
El magistrado señaló que “el hecho quedó palmariamente probado con la filmación de la zona de seguridad y del momento en que la actora pasa por los sensores y estos detectan la anormalidad”, todo lo cual “fue exhibido en el transcurso de la audiencia de debate (…), a los que hicieron referencia todos los presentes que se reconocieron en dicho filmación”, destacó el vocal.
En ese sentido, se precisó que “fácilmente se puede advertir de la valoración de la actitud de Figueroa Schmidt dentro de los parámetros de causalidad, proporcionalidad y oportunidad, constituye una justa causal de despido por revestir la misma una magnitud de suficiente importancia dada las particularidades que requiere este tipo de prestación gerencial (art. 242 de la LCT)”.
Desplazar
Se afirmó que ello “autoriza a desplazar del primer plano al principio de conservación del empleo (art.10 de la LCT), siendo por ende ajustada a derecho la medida adoptada por la demandada”, la cual “fue comunicada oportunamente, guarda proporcionalidad dado los antecedentes laborales de la actora (las cuales surgen de las testimoniales transcriptas)”, subrayó la Sala.
Por ello, se concluyó que “siendo ello así no pueden prosperar ninguna de las indemnizaciones pretendidas por la actora derivadas de la ruptura del contrato de trabajo”.