“La presencia de un coach en el ámbito empresarial está convirtiéndose en una de las mejores inversiones, ya que de a poco las organizaciones están comprendiendo la necesidad de sacar el mayor partido a su capital humano para así conseguir una completa integración de los equipos de trabajo en el entorno corporativo”, aseguró Trabajando.com, consultora que se especializa en recursos humanos.
En este marco, Pablo Molouny, su gerente general, señaló: “Una de las consecuencias más tangibles del coaching empresarial, y lo que hemos podido vivir nosotros como empresa, es la innovación y la consecución de éxitos de una forma mucho más rápida y participativa de parte de quienes constituyen la organización. Es la mejor inversión que podría hacer una organización con visión de crecimiento”.
Al mismo tiempo, la consultora puntualizó algunas acciones del coaching dentro de las organizaciones:
– Reforzar las capacidades de cada uno de los empleados, ya que esto repercute en un futuro logro colectivo.
– Fomentar el trabajo en equipo, ayudando a que los trabajadores de una organización sigan metas y objetivos comunes, con una comunicación efectiva y un mayor entendimiento de uno mismo.
– Identificar el rol de cada persona dentro de la organización para que así tenga mucho más claro cuáles son sus cargos y funciones. Asímismo, sabrá lo que está permitido y prohibido dentro de la empresa.
– Ayudar a enfrentar y resolver conflictos mediante el descubrimiento de distintas herramientas. De esa forma mejora la convivencia, se superan los obstáculos y, como consecuencia, se tiene una convivencia más satisfactoria.
– Preparar a los empleados para los cambios. Es muy importante que estén abiertos a ello y que, por el contrario, no se opongan a lo nuevo por un sentimiento de intranquilidad y pérdida que se suele generar.
– Crear relaciones de confianza entre los miembros de la organización. Al aprender sobre comunicación, se puede hablar sin problemas de los hechos que se producen y no hacer juicio de cómo son las personas.