Por Cecilia Ceballos, Supervisora de Selección. Consultores de Empresas.
Si buscar trabajo es toda una actividad compleja, encontrar trabajo es un trabajo en sí mismo. Esta tarea entraña una actitud única de cara al mercado laboral. Mientras buscar trabajo puede demorar semanas, o incluso meses -si la actividad no está bien planeada-, encontrar trabajo tiene resultados mucho más inmediatos.
Hallarlo supone, ante todo, un proceso actitudinal que llevará al interesado a la consecución del objetivo. Requiere realizar un proceso personal de adecuación del perfil a las exigencias del mercado. Destacar aquellos puntos fuertes que se cuenten y adquirir pericias necesarias para hacer frente a las demandas. En este camino, es bueno rescatar algunas claves:
Actitud. Es fundamental mantener una actitud positiva. Las organizaciones necesitan gente que disfrute de su tarea y que ayude a generar un clima positivo. Si bien la búsqueda laboral suele ser una instancia de tensión, es importante que se mantenga activo en su proceso de formación laboral. Nunca se debe descuidar la formación continua y el perfeccionamiento del perfil. Éste, desarrollado, es la mejor carta de presentación ante un empleador.
Perfil. Escudriñe el mercado del trabajo. Saber qué quiere cada empleador es fundamental para obtener el éxito deseado. Enfóquese en pedidos que tengan correlación con su experiencia y formación, céntrese en aquellos perfiles que puedan comulgar con el suyo propio y así tendrá más oportunidades de ser reclutado.
Búsqueda. Planificar, actuar y evaluar. Sepa qué va a hacer cada día que invierte en su búsqueda de trabajo. Analice adónde apuntar la búsqueda. Priorice oportunidades de acuerdo con su perfil. Pondere medios, formas y tiempos -en los actuales, con el diario no basta-. Recuerde acudir a agencias de empleo, sitios digitales y redes sociales.
Currículum. Recuerde potenciar su perfil de acuerdo con el puesto buscado, de nada sirve aportar información irrelevante. Resalte trabajos anteriores, formación y aptitudes personales que tengan correlación con la búsqueda en la que participa.
Entrevista. Si bien la indumentaria es importante, no es decisiva en una entrevista. Hay que tener presente una serie de factores dirimentes a la hora de “seducir” al reclutador. En primer lugar deberá demostrar conocimiento de la la empresa y del sector en la que opera. Otro consejo es cooperar con el entrevistador, respondiendo de forma clara y concreta. Por último, no hay que olvidar que cada postulante debe ser capaz de poder vender su perfil, para lo cual es fundamental mostrar disposición positiva y motivación para ocupar el puesto en cuestión.