A través de un dictamen, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) ratificó un polémico criterio que afecta a las Uniones Transitorias de Empresas (UTE).
La opinión del organismo recaudador busca aclarar una “redacción confusa” de la normativa que establece el régimen general de retención sobre las cargas sociales.
El dictamen afirma que las UTE sufrirán retenciones en cargas sociales, aun cuando ni ellas ni las compañías que las integran tengan personal a cargo.
Si bien no se trata de una situación habitual, la decisión afecta particularmente a las UTE conformadas por empresas unipersonales o sociedades familiares.