En España, la Audiencia Provincial de León atenuó una pena por el delito tipificado en el país como “agresión sexual continuada” teniendo en cuenta que tanto el victimario como la damnificada son gitanos.
La agencia EFE reportó que el hombre, siete años mayor que la víctima, la embarazó tres veces entre sus 12 y los 15 años, y que nacieron dos niños y una niña.
“Si bien existe una importante diferencia de edad, no hay que olvidar que en la cultura gitana las uniones de pareja se producen a edades muy tempranas y que la víctima manifestó que, pese a su corta edad, sabía lo que eran las relaciones sexuales y sus consecuencias y las consintió sabiendo de su trascendencia e importancia, pues en su cultura las niñas de su edad suelen empezar a emparejarse y tener hijos”, afirmó el sentenciante.
Aclaró que los hechos enjuiciados eran muy graves, pero aplicó la circunstancia atenuante cualificada por la menor antijuridicidad.
La Audiencia Provincial de León citó una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León en la que ya se arguyó sobre la cultura compartida en un caso similar y concluyó que reforzó su conclusión de que “ambos se hallaban en cierta manera próximos en grado de desarrollo o madurez física o psicológica”.
Cabe aclarar que la Fiscalía solicitó la atenuante y ninguna parte se opuso.
En un primer momento, evaluó reclamar una condena de 37 años por tres delitos de agresión sexual, uno de violencia de género en su modalidad de maltrato físico y otro más de maltrato habitual, pero el hombre aceptó los hechos y se llegó a un acuerdo entre las partes, por lo que finalmente la petición de cárcel fue de 9 años y 9 meses de prisión, por agresión sexual continuada.