El dato surge de un reciente informe elaborado por la Unión Industrial Argentina, sobre el mes de junio. El grupo advirtió sobre el impacto de las medidas del Gobierno, sin incluir aún la devaluación posterior a las PASO
En junio, la actividad industrial en el país experimentó una caída del 0,3% en comparación anual y del 2,3% en relación a mayo.
El dato surge de un reciente estudio elaborado por el Centro de Estudios de la Unión Industrial Argentina (UIA), que revela también que ocho de 12 sectores registraron mermas en su producción.
La UIA remarcó que la tendencia a la baja se da en un contexto marcado por las restricciones en el abastecimiento de insumos y servicios y por una creciente incertidumbre a nivel macroeconómico.
Además, y sin incluir aún la devaluación posterior a las PASO, alertó sobre el impacto de las medidas motorizadas por el Gobierno nacional.
“A partir de julio el panorama muestra más elementos de incertidumbre producto del impuesto PAÍS a las importaciones y del aumento del tipo de cambio con posterioridad a las PASO”, sostuvo.
Dispar
En este marco, precisó que los datos disponibles de julio reflejaron una situación dispar en la producción.
Asimismo, señaló que se acentuó el cambio de tendencia en algunos indicadores; por ejemplo: hubo un menor crecimiento de la actividad automotor y se aceleró la caída de la demanda de energía eléctrica de grandes usuarios industriales.
La UIA apuntó que la escasez de divisas profundiza los problemas asociados a las restricciones en los pagos de bienes y servicios críticos para la producción y “genera incertidumbre sobre la dinámica del mercado interno”.
El grupo reportó que el segundo trimestre del año cerró con un menor crecimiento anual (+2,2%) que el primero y que el semestre terminó con un aumento de +3,5% anual.
Primer semestre
“Se nota una heterogeneidad con sectores atravesados por drivers expansivos (de los 3,5 puntos de suba, 2,5 fueron del sector automotor y 0,8 del sector de metales básicos) con otros con drivers negativos por el impacto de la sequía y las restricciones de orden macroeconómico”, sumó.
A nivel sectorial, detalló que persiste cierta disparidad en el desempeño, en sintonía con lo sucedido durante los últimos meses.
Puntualizó que predomina un elevado crecimiento en ramas asociadas al sector energético y automotor, mientras que hay caídas las vinculadas al sector agrícola y a la construcción.
“La caída de junio obedeció al menor dinamismo en el sector de minerales no metálicos, alimentos y bebidas y en particular con el impacto de la sequía”, ilustró en su informe.
La UIA reseñó que los sectores más afectados fueron Minerales no Metálicos, con una caída del 5,6% por la disminución en la actividad de construcción, y Alimentos y Bebidas, que registró una baja del 3,3% a causa de la sequía, que impactó la producción de molienda.
Otros sectores que presentaron descensos incluyen Sustancias y productos químicos (-2,6%), Papel y Cartón (-2,2%), Metales básicos (-1,6%) y Metalmecánica (-0,4%).
Los signos de crecimiento se dieron en el sector Automotor, que experimentó un aumento del 10,6%, aunque menor al promedio de meses anteriores, impulsado principalmente por las ventas locales.
Sin embargo, las exportaciones se contrajeron por primera vez en el año.
Según el estudio de la UIA, aquel crecimiento “se vio impulsado durante el mes principalmente por las ventas de autos nacionales al mercado local”, y advirtió que en los próximos meses se espera que el sector desacelere sus crecimientos “en un contexto desafiante”.
Cabe añadir que la Refinación de Petróleo también registró un incremento, con un 2,7% anual, impulsado por la producción de naftas para el mercado interno.