La estrella brasileña del Real Madrid, Vinícius Jr., explotó. Lo hizo en la cancha de fútbol y también en las redes.
El jugador es objeto de cánticos e insultos racistas desde las gradas de los estadios españoles durante las dos últimas temporadas. Cansado del acoso, cuestionó duramente a La Liga española e interpeló a toda España, después de los insultos sufridos el domingo durante el partido de visitante frente a Valencia por la 35ta. fecha del torneo. Vinícius Jr. aseguró también que los racistas fueron premiados cuando ocurrió su expulsión.
El delantero carioca le solicitó al árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea que detuviera el partido por las agresiones recibidas desde las gradas del estadio Mestalla. El referí intentó calmar la ira del jugador, y posteriormente, le mostró la tarjeta roja cuando el brasileño estuvo involucrado en una trifulca y golpeó al futbolista local Hugo Duro.
“El premio que los racistas consiguieron fue mi expulsión. No es fútbol; es La Liga”, afirmó el brasileño al iniciar un duro descargo en sus redes sociales.
“No fue la primera vez, ni la segunda, ni la tercera. El racismo es normal en La Liga. La competición lo considera normal, la Federación también y los rivales lo fomentan. Lo lamento mucho. El campeonato que una vez perteneció a Ronaldinho, Ronaldo, Cristiano y (Lionel) Messi ahora pertenece a los racistas”, sostuvo.
Vinícius aseguró que en Brasil a España se lo conoce como un “país racista”. “Es una hermosa nación, que me acogió y a la que quiero, pero que ha aceptado exportar al mundo la imagen de un país racista. Lo siento por los españoles que no estén de acuerdo”, sostuvo.
El domingo pasado, Vinícius Júnior fue recibido por aficionados que coreaban la palabra “mono” incluso cuando todavía no había descendido del colectivo que trasladó al equipo del Real Madrid a las puertas del estadio valenciano.
Ya durante el encuentro, el partido se interrumpió brevemente en el minuto 71, cuando el jugador señaló al árbitro a algunos de sus agresores, y se leyó por los altavoces del estadio una declaración contra el racismo, que forma parte del protocolo de La Liga para este tipo de incidentes.
El brasileño reafirmó su lucha contra la discriminación racial y deslizó que podría continuarla fuera de España, decidido a dejar el Real Madrid frente a esas agresiones. Los medios españoles señalaron al respecto que el París Saint-Germain “está atento” a las novedades sobre el futuro del jugador.
El técnico de Real Madrid, Carlo Ancelotti, mostró un excepcional respaldo al jugador. Durante una entrevista posterior al partido reaccionó con impaciencia cuando se le pidió que hablara del partido. “Yo no quiero hablar de fútbol”, dijo. “¿No les parece más importante hablar de lo que pasó aquí?”, agregó. Y mostró así la importancia del hecho.
El caso de Vinícius generó una fuerte condena del ambiente político, dirigencial y deportivo. El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, expresó su solidaridad con su compatriota en una conferencia de prensa al cierre de la cumbre del G7 en Hiroshima, Japón.
“No es posible, en pleno siglo XXI, tener un prejuicio racial tan fuerte en tantos estadios de fútbol. Es injusto que un pobre chico a quien le ha ido tan bien en la vida, que tal vez se convertirá en el mejor del mundo, sea insultado en cada estadio en el que juega”, condenó.
El titular de la FIFA, el suizo Gianni Infantino, también hizo referencia al incidente y afirmó: “No hay lugar para el racismo en el fútbol ni en la sociedad, y la FIFA apoya a todos los jugadores y a todas las jugadoras que lo han sufrido en carne propia”.
“Los acontecimientos ocurridos durante el partido entre el Valencia y el Real Madrid demuestran lo crucial de esta lucha. Existe un proceso de tres pasos en las competiciones de la FIFA y se recomienda que se use en todos los niveles del fútbol”, recordó.
“En primer lugar, se detiene el partido y se anuncia. En segundo lugar, los jugadores abandonan el terreno de juego y el anunciador dice que, si continúan las agresiones, se suspenderá el partido. El partido se reanuda y, en tercer lugar, si continúan las agresiones, el partido se detendrá y los tres puntos serán para el adversario. Estas son las normas que deberían aplicarse en todos los países y en todas las ligas”, afirmó el titular de la FIFA.
El club Real Madrid anunció que se presentó en la Fiscalía General del Estado para denunciar a los agresores por “delitos de odio y discriminación”, que constituyen un “ataque directo” al modelo de convivencia de nuestro Estado social y democrático de derecho.
Para La Liga, Vinícius es “injusto”
El polémico presidente de la competición, Javier Tebas, retrucó los dichos del brasileño y consideró “muy injusto” que diga que La Liga y España son racistas. En este sentido, Tebas aseveró: “Desde La Liga denunciamos y perseguimos el racismo con toda la dureza dentro de nuestras competencias”.
De todas maneras, reconoció que el jugador es víctima de un hostigamiento particular al afirmar que durante esta temporada del fútbol español se han denunciado nueve veces insultos racistas y ocho de ellos han sido por insultos contra Vinícius. “Siempre identificamos a los energúmenos y elevamos la denuncia a los órganos sancionadores. Da igual que sean pocos; siempre somos implacables”, aseguró Tebas.
Sin embargo, minimizó los cuestionamientos del jugador brasileño. “No podemos permitir que se manche la imagen de una competición que es sobre todo símbolo de unión entre pueblos, donde más de 200 jugadores de raza negra en 42 clubes reciben cada jornada el respeto y el cariño de toda la afición, siendo el racismo un caso extremadamente puntual que vamos a erradicar”, afirmó.
La respuesta de Tebas provocó una furiosa respuesta del jugador en redes sociales. “Una vez más, en lugar de criticar a los racistas, el presidente de La Liga aparece en las redes sociales para atacarme”, escribió Vinícius. “Por mucho que hables y finjas no leer, la imagen de tu campeonato está golpeada. Mira las respuestas a tus posts y te llevarás una sorpresa. Omitirte solo te iguala a los racistas”, disparó.
El incidente ocurre en un momento en el que España busca apoyo mundial para asegurarse los derechos de organización de la Copa Mundial de 2030 como parte de un esfuerzo conjunto con Portugal y Marruecos.
De por vida
Por el revuelo que generaron las declaraciones del jugador, el club Valencia comunicó que expulsará de por vida a los hinchas que emitieron los gestos racistas.
En un comunicado informó que la policía ya identificó a uno de los asistentes al estadio Mestalla, responsable de insultos al jugador, y que trabajan para confirmar “a otros posibles implicados”.
“El Club condena enérgicamente este tipo de comportamientos, que no tienen cabida en el fútbol y no se corresponden con los valores del Valencia CF y su afición”, afirmó la institución. En este sentido, el club advirtió que aplicará la “máxima severidad” y expulsará de por vida a los hinchas involucrados.
Valencia recordó que ya aplicó esta sanción en 2019, cuando un hincha hizo gestos y saludos fascistas al público de Arsenal de Inglaterra en el marco de un partido de la Liga de Europa.
Por su parte, la agencia de representación del brasileño, TFM, comparó la situación con el emblemático caso del estadounidense George Floyd: “Hemos asistido a escenas de racismo generalizado, intencionado y ya institucionalizado, que son de las más repugnantes de la historia del fútbol. Tres años después de que el mundo se conmocionara con un vídeo en el que George Floyd era brutalmente inmovilizado, hoy, el mundo entero ha sido testigo de un suceso en el que Vinícius ha sido inmovilizado de forma cobarde, violenta e inaceptable durante una discusión”.
El astro brasileño Ronaldo Nazario acompañó a su compatriota en su lucha y el DT de Barcelona, Xavi Hernández, dio un firme mensaje contra el racismo, entre otras varias adhesiones con el futbolista agredido.
La estrella francesa Kylian Mbappé estuvo a punto de a Vinícius en Madrid la temporada pasada y publicó un mensaje de apoyo al brasileño en Instagram. También lo hiso Neymar, que enfrentó abusos raciales cuando jugaba en España para el Barcelona.
Funcionarios del Gobierno de España también se refirieron al tema que copó la agenda mediática de ese país y asumieron una postura similar a la del presidente de La Liga. La vicepresidenta del Gobierno de España, Yolanda Díaz, opinó que los cánticos racistas en los estadios de fútbol “no representan” el sentir del pueblo de su país “ni a ninguna hinchada de fútbol”.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también se expresó al respecto y afirmó que España “no es un país racista”. De todos modos, el presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, ensayó un mea culpa.
“Tenemos un problema en nuestro país de comportamiento, de educación, de racismo”, dijo en una rueda de prensa. “Mientras que haya un solo aficionado, un solo indeseable o un grupo de indeseables que insulte por condición sexual, por color de piel, por credo, pues tenemos un grave problema”.