Entre las firmas de Córdoba, 75% cuenta con trabajadores contratados de manera temporal. En muchas compañías llegan a entre 20% y 40% de su dotación.
Pese al repunte que atraviesa la industria en general y el sector en particular, siete de cada diez autopartistas cordobesas aún mantienen trabajadores bajo formas flexibles de contratación, y en no pocos casos en porcentajes que ascienden hasta 40% de su plantel laboral. Si bien estas empresas no se desprendieron de gran cantidad de trabajadores durante la crisis -la generalidad lo hizo con los temporarios-, ahora que el horizonte económico aparece más promisorio y la mayoría de las grandes terminales anunció nuevos planes e inversiones aún mantienen buena parte de sus trabajadores en condiciones de fragilidad laboral.
La seccional local de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que encabeza Augusto Varas, presentó ayer un nuevo informe de su Observatorio Social y Laboral (OSYL), una iniciativa realizada junto a la Fundación para el Desarrollo y Promoción Metalúrgica (Fundeprom). Desde el punto de vista técnico, el proyecto estuvo coordinado por Javier Moreira y Eduardo González Olguín, y fue elaborado a partir de la opinión recabada entre delegados de la entidad gremial durante septiembre y octubre pasados. El relevamiento incluyó a trabajadores de empresas pequeñas, medianas y grandes.
En su última edición, el Observatorio incorporó dos nuevas dimensiones: por un lado, el resultado de la elaboración de una canasta propia para seguir la suba de los alimentos en Córdoba. Y por otro, la indagación sobre las condiciones de contratación que predominan en el sector metalúrgico, tanto en la trama autopartista como en la no autopartista.
Dada la importancia de este rubro en la industria cordobesa y teniendo en cuenta además la gran vitalidad que mostró tras la última crisis internacional, el informe resulta un insumo importante para conocer la situación de las empresas locales.
Fragilidad laboral
El trabajo indica que, de acuerdo con la opinión de los delegados consultados, 60% de las empresas del sector metalúrgico tiene en su plantel trabajadores contratados de manera temporal.
Pero, dentro del sector, la fragilidad laboral de los empleados es más alta en las autopartistas, pues 75% de esas firmas tiene operarios bajo esa forma de contratación, mientras que en las no autopartistas esa modalidad alcanza 52%.
De acuerdo con la interpretación de Varas, “a pesar de los años de crecimiento y del repunte de los últimos meses, las empresas dudan o no quieren efectivizar trabajadores”.
El dirigente considera que los empresarios mantienen las contrataciones temporarias “porque de esa manera mantienen una porción de poder adicional: pueden mostrar ante los demás trabajadores que pueden recortar contratos”, opinó Varas.
Asimismo, el Observatorio reveló que esa modalidad de contratación es muy extendida en algunas empresas: entre las autopartistas, casi 38% tiene entre 20% y 40% de su planta de personal bajo esa modalidad. Otro 30% de las firmas tiene hasta 20% de su dotación contratada de manera temporaria.
Nivel de actividad
Otro dato llamativo del informe es que, de acuerdo con la opinión de los delegados, en el sector metalúrgico la producción se incrementó más en los últimos dos meses en el subsector no autopartista, al contrario de lo que suele pensarse, dado el nivel de producción creciente de las terminales locales.
Según el informe, 42% de los trabajadores consideró que la empresa en la que se desempeña aumentó su producción en septiembre y octubre. Pero ese porcentaje asciende a 48% en el subsector no autopartista y es de 31% en el autopartista.
Esa vitalidad se correspondió con los incrementos en los planteles de trabajadores, que fueron más grandes entre las empresas no autopartistas, de las cuales 38% tomó personal en los últimos dos meses.
Si bien la mayoría de los trabajadores metalúrgicos (84%) tiene expectativas favorables con relación con el nivel de actividad y producción, ese optimismo no se traslada al análisis de su futuro laboral, pues sólo 55% lo consideran seguro, en tanto que otro 45% está “más o menos” o “nada” seguro de su empleo en los próximos meses.
Por último, el nivel de conflictividad laboral sigue siendo alto en el sector -60% de los trabajadores tiene una relación “regular” o “mala” con su empleador-, pero es en el sector no autopartista en el que se advierten más conflictos entre operarios e industriales, pues allí hay problemas en 65% de las empresas, de acuerdo con el trabajo.
“Ese nivel de conflictividad está ligado al nivel salarial, que es menor en el sector no autopartista”, estimó Varas.
Con vistas a la puja salarial 2011
La UOM presentó su propia canasta alimentariaCuando ya todas las organizaciones gremiales abandonaron la medición del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) sobre el nivel de inflación para negociar subas salariales, otras avanzan en la construcción de su propia canasta de alimentos. Así ocurre con la regional local de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), que ayer presentó su propia Canasta Básica Alimentaria (CBA), comparable con la del organismo oficial. Este instrumento fue elaborado por economistas y nutricionistas, considerando una familia tipo -como el Indec-, pero incorporando más alimentos y primeras marcas.
De acuerdo con la medición del Observatorio de la UOM, a lo largo de octubre la canasta básica alimentaria se incrementó en Córdoba 7,58%, más del doble que lo relevado por el organismo oficial, para el cual el aumento fue en el país de 3,45%. Según el estudio local, para adquirir esta canasta se requirieron en octubre 1.318 pesos, mientras que el Indec calculó 569 pesos. “Esto nos permitirá conocer el costo de la canasta en Córdoba, donde es diferente a la de otras regiones. Será una herramienta para discutir salarios, pero también para conseguir una mejor calidad de vida en general”, consideró Varas.
Exportaciones
De acuerdo a la opinión de los delegados de la UOM, más del 50% de las empresas del sector metalúrgico exporta su producción, de manera directa o indirecta. Ese porcentaje llega al 68% al considerar solamente el subsector autopartista, muy traccionado por Brasil.