En Estados Unidos, Charles Lieber, de 62 años, un reputado nanocientífico y profesor de la Universidad de Harvard (dirigió su departamento de química) fue declarado culpable de haber mentido sobre sus vínculos con un programa de reclutamiento dirigido por China.
Se trata de una victoria legal para la iniciativa del Departamento de Justicia norteamericano para develar la trama de “espionaje económico chino” en el país.
Un jurado federal de Boston responsabilizó a Lieber por hacer declaraciones falsas a las autoridades y de impuestos y por no informar sobre una cuenta bancaria que tenía en el gigante asiático.
Según los fiscales, Lieber, en su búsqueda de un Premio Nobel, aceptó en 2011 convertirse en un “científico estratégico” en la Universidad Tecnológica de Wuhan y participó en una campaña de reclutamiento llamada “Programa de los Mil Talentos”.
Los acusadores afirman que China lo usa para reclutar investigadores extranjeros que compartan sus conocimientos. La participación no es un delito, pero mentir sí lo es.
La defensa, por su parte, adujo que los investigadores manipularos las pruebas, que carecen de documentación para respaldar sus afirmaciones y que se basaban en una entrevista del FBI con el científico tras su detención, a la que definieron como “confusa”.