A pocos días de que el Gobierno oficializara la postulación del juez federal Daniel Rafecas para encabezar la Procuración de la Nación, se presentó ante el Ministerio de Justicia la primera impugnación contra esa candidatura.
La Fundación Apolo, representada por los abogados Yamil Santoro y José Magioncalda, con el patrocinio de José Javier Bulacio, planteó un escrito en el que cuestiona la “idoneidad moral” del magistrado para ese cargo.
La entidad criticó la “falta de independencia” del juez y, principalmente, su actuación en la denuncia del fiscal Alberto Nisman contra la vicepresidenta Cristina Fernández.
Desde la organización señalaron que fue “un hecho clave que ha signado su carrera judicial la desestimación, en tiempo récord, de la denuncia que realizara el fiscal Alberto Nisman contra la entonces Presidenta de la Nación por el delito de encubrimiento de los autores del atentado a la AMIA”.
Además, recordaron la ratificación de la Corte Suprema de Justicia de una sanción aplicada a Rafecas por la Magistratura “por recibir en privado a personas ajenas a la causa iniciada por la denuncia de Nisman, adelantarles la decisión a tomar, omitir dar intervención a quienes eran parte, extendiendo un manto de sospecha sobre el trato igualitario que debe prodigarse los sujetos procesales”.
Luego de remarcar también conductas polémicas en el marco de la causa Ciccone, los abogados indicaron que “resulta un despropósito pretender que el Ministerio Público sea conducido por quien demostró no ser independiente, eludió investigar la denuncia que llevó a la muerte a un destacado integrante del organismo que hoy pretende conducir y, finalmente, puso en duda -sin fundamento alguno- la salud mental del fallecido funcionario”.
La postulación de Rafecas se conoció la semana pasada luego de que se publicara en el Boletín Oficial su candidatura para ocupar el cargo que está vacante desde octubre de 2017, tras la salida de Alejandra Gils Carbó.