Cerró el año con 60.997 deudores y en enero volvió a mostrar una retracción, luego de nueve meses consecutivos de suba y del pico de 61.912 de noviembre. El quiebre de la tendencia supone que,
al menos por ahora, el momento más crítico aparentemente quedó atrás
La morosidad en el cumplimiento del impuesto a los Ingresos Brutos mostró en diciembre la primera retracción desde marzo pasado, caída que quedó ratificada en enero de 2019 cuando se contabilizaron 60.274 deudores de ese tributo provincial.
Los datos a los que accedió Comercio y Justicia aparecen reflejados en el denominado padrón de Riesgo Fiscal que todos los meses publica la Dirección de Rentas.
Se trata de sujetos obligados con algún tipo de irregularidad para con el Fisco, que incluye no sólo deuda sino también falta de declaraciones juradas, entre otras falencias.
El quiebre de la tendencia que llevó a que desde marzo pasado hasta noviembre inclusive el listado sumara más de 20 mil deudores, parece marcar un impasse respecto al impacto de la crisis sobre el cumplimiento de las obligaciones fiscales. Con todo, desde Rentas insisten en que también se avanzó en un mayor seguimiento de los deudores, razón por la cual el padrón creció ostensiblemente en los meses anteriores.
Como fuere, el aumento de la morosidad coincidió con la profundización de la recesión en el país y su correspondiente impacto en Córdoba.
De acuerdo con datos oficiales, desde marzo pasado, cuanto al padrón alcanzó un piso de 40.571 morosos, el número de irregulares sumó hasta noviembre 21.341 nuevos deudores y llegó a 61.912 incumplidores. Sin embargo, en diciembre anotó la primera baja hasta los 60.997 morosos y, según los datos ya informados correspondientes a enero, el padrón volvió a reducirse hasta 60.274 deudores.
Si bien la cifra sigue siendo ciertamente elevada, el amesetamiento con leve caída, supone que, al menos desde el punto de vista de la morosidad en el pago como señal de las dificultades de los contribuyentes frente a la crisis, el pico crítico parece haber quedado atrás, al menos por ahora.
El listado de Riesgo Fiscal hizo su debut en abril de 2017. En aquel momento se contabilizaron 111.719 contribuyentes en situación irregular, prácticamente 50 por ciento de los obligados por Rentas para aquel tributo.
Con todo, al mes siguiente la cifra bajó a 61.153 morosos.
En aquel momento, Rentas resolvió modificar el criterio de corte respecto a la deuda de debía tener el contribuyente para entrar o no en el padrón de “escrachados”. Por lo tanto, la baja sustancial en el listado de morosos no se debió tanto a que los irregulares hubiesen cumplido con el fisco sino básicamente al cambio de condiciones impuestas por Rentas. Desde entonces, el padrón registró bajas hasta el piso de julio de 2017, cuando llegó a 56.078 contribuyentes. Luego, osciló entre esa cifra y poco más de 57 mil.
Sin embargo, ya en noviembre subió a 58.614 y en diciembre se mantuvo casi en esa línea, esto es 58.323.
Finalmente, en enero, previo a una nueva depuración del padrón con contribuyentes que pagaban montos fijos, la cifra volvió a subir hasta 59.645 contribuyentes. Sin datos disponibles de febrero, marzo volvió a marcar el nuevo piso, ahora con el padrón “limpio” de quienes tributaban lo que más tarde pasó a ser el monotributo provincial.
El padrón de Riesgo Fiscal incluye CUIT y denominación del contribuyente. En la lista se incluye todo tipo de contribuyente, desde empresas a particulares, con muchos nombres conocidos públicamente.
Quienes figuren en el listado deben tributar alícuota agravada hasta tanto regularicen su situación y sean eliminados del padrón de “escrachados”.
La herramienta Riesgo Fiscal es un régimen de revisión continua para los contribuyentes de IIBB en función del interés fiscal que presentan y del cumplimiento de los deberes formales y materiales.
Están alcanzados aquellos contribuyentes, agentes y/o responsables de IIBB que se encuentren “con alguna irregularidad” frente al Fisco. El listado se actualizará los días 22 de cada mes.
Entre las situaciones “irregulares” que ameritan la publicación de los contribuyentes en el padrón de Riesgo Fiscal figuran quienes:
-en los últimos 36 meses no hubiesen presentado o pagado seis o más declaraciones juradas y/o anticipos;
-tengan determinada de oficio y firme la obligación tributaria y no la hayan abonado o regularizado dentro del plazo otorgado;
-prestaron conformidad por una fiscalización y no abonaron o regularizaron la deuda dentro del plazo otorgado;
-tienen deuda por la cual se haya iniciado ejecución fiscal o procedimiento de ejecución fiscal administrativa con control judicial;
-no den cumplimiento a una fiscalización electrónica o requerimiento.
En tanto, para los agentes de retención, percepción y/o recaudación se incluye a quienes:
-no hubiesen presentado tres o más declaraciones juradas;
-mantengan adeudado el saldo de una declaración jurada vencido el plazo para el ingreso de aquél.
En todos los casos, cuando dos o más notificaciones, intimaciones o requerimientos al domicilio fiscal constituido hayan sido devueltos.
Quienes figuren en el padrón de Riesgo Fiscal tendrán diferente tratamiento. Por lo pronto, los agentes de retención, percepción y recaudación aplicarán distintas alícuotas, según el caso. Los agentes de retención impondrán alícuotas de 5% y de 20%, según el caso, o bien incrementadas en 50% para situaciones determinadas. En tanto, los agentes de percepción aplicarán alícuotas de 6% y de 16% y también incrementadas en 100%, siempre según cada situación. Rentas podrá fijar alícuotas diferenciales para el régimen de recaudación Sircreb, siempre para los contribuyentes de Riesgo Fiscal.
Padrón municipal
En tanto, no hubo mayores cambios en el listado de Riesgo Fiscal que publica la Municipalidad de Córdoba cuyo último dato disponible corresponde al período que va desde el primero de enero hasta el 28 de febrero próximo. Ese padrón incluye a 574 contribuyentes, según los datos informados para el período mencionado.
Previamente, en octubre y para los meses de noviembre y diciembre se habían contabilizado 547 deudores. En tanto, el padrón informado en agosto era de 562 morosos y el de junio, cuando hizo su debut el sistema, había arrancado con 602 contribuyentes en situación irregular.
Al igual que en la Provincia, los morosos de la comuna deben tributar una alícuota extra por aparecer en el listado con algún tipo de irregularidad, en este caso en la tasa que grava a la Actividad Comercial, Industrial y de Servicios.