Fue elaborado por el IRAM con el objeto de lograr el abordaje efectivo de la calidad ocupacional dentro de la gestión integral de la organización
El Instituto Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM) publicó una herramienta de gestión para el abordaje efectivo de los aspectos laborales y de derechos humanos en las organizaciones y sus cadenas de valor. Fue elaborado con el objeto de lograr el abordaje efectivo de la calidad ocupacional dentro de la gestión integral de la organización y de brindar elementos objetivos para su validación externa.
El Referencial 11 “Gestión de la Calidad Ocupacional” contiene criterios acordes con las normas de sistemas de gestión reconocidas local e internacionalmente basados en un marco conceptual consistente con el establecido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para la definición de Trabajo Decente.
La calidad ocupacional es hoy un elemento esencial dentro de los estándares de calidad de gestión de las organizaciones, y su abordaje efectivo brinda a las organizaciones un estándar de competitividad diferencial.
Gestionar la calidad
El nuevo documento establece los requisitos de un sistema de gestión de la calidad ocupacional para las organizaciones que decidan profundizar, tanto su puesta en práctica como su promoción en la cadena de valor. “Su implementación permite a las organizaciones estar alineadas con los principios y recomendaciones de la OIT y otras agencias de Naciones Unidas sobre calidad ocupacional y contribuir al mejoramiento de las condiciones laborales relacionadas con el trabajo realizado dentro, por, para o en nombre de la misma, incluido el trabajo subcontratado”, explica Adriana Rosenfeld, coordinadora del IRAM.
Los referenciales normativos son documentos normativos alineados con la norma ISO 9001, realizados a pedido de un organismo público u organización representativa de la sociedad civil con el objetivo de servir de instrumento de apoyo a una política pública y cuyo alcance son todos los procesos principales o sustantivos, los de dirección y los de apoyo necesarios que gestiona la organización o un área de ésta. Al estar alineados con la lógica de la ISO 9001 y los requisitos establecidos para mantener bajo control todos los procesos principales, una vez certificado el referencial, la organización puede, con un esfuerzo adicional, certificar la norma ISO 9001 u otra norma internacional ISO de referencia.
Uno de los valores agregados de un referencial es que facilita la incorporación de la cultura de la calidad en la organización haciendo énfasis en la mejora continua como estrategia sistemática de desarrollo y en consecuencia promueve el uso de la metodología conocida como “PHVA” (Planificar-Hacer-Verificar-Actuar) y el conocimiento y aplicación de los principios de la calidad.