Entre los impuestos ligados al comercio exterior, los derechos de exportación aumentaron 228,5% por la suba del tipo de cambio y el derecho de exportación adicional
La recaudación tributaria de noviembre aumentó 33,7% respecto de igual mes del año pasado al sumar $300.119 millones, debido al aporte de los impuestos ligados al comercio exterior.
“En un contexto de retracción económica, la recaudación se defendió bastante bien”, dijo a la prensa el director de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Leandro Cuccioli, durante la presentación de los resultados del mes pasado.
De esta manera, el funcionario se refirió al desempeño de la recaudación del penúltimo mes del año, cuya variación estuvo por debajo de la inflación minorista, que se estima rondará 42% interanual.
Cuccioli destacó que en ese contexto de recesión “la AFIP otorga una gran variedad de planes de pago” para quienes estén en mora “y se ve el esfuerzo de los contribuyentes para ponerse al día” con las obligaciones tributarias.
Más allá de las declaraciones, escasos tributos superaron el nivel del incremento generalizado de precios, entre ellos las retenciones, cuya recaudación subió 228% para sumar $14.700 millones debido al aumento de este impuesto y el incremento del tipo de cambio.
También el impuesto a los débitos y créditos en cuenta corriente mostró una suba de 45,3%, debido a una mayor registración del comercio interno. En cambio, los ingresos por derechos de importación subieron 31% a $9.000 millones, consecuencia de que la devaluación compensó, parcialmente, la caída en las compras al exterior.
En el caso del IVA, el tramo impositivo creció 41,2%, casi en línea con la inflación, para sumar $73.100 millones. En tanto que el IVA aduanero aumentó 6,4%, afectado por un día hábil menos de recaudación respecto del mismo mes del 2017, por la reducción de las percepciones en el IVA para importaciones de bienes muebles y por una fuerte retracción de las importaciones.
Por su parte, la recaudación del impuesto a las Ganancias aumentó 37,9% para sumar $65.400 millones, por mayores ingresos por retenciones y por anticipos de sociedades.
Este resultado se explica por el incremento del impuesto determinado en el último período y por el vencimiento del pago del saldo de declaración jurada de sociedades con cierre de ejercicio en junio.
En tanto, la percepción por el impuesto a los Bienes Personales se redujo a la mitad, a $430 millones, con una incidencia negativa del aumento del mínimo no imponible y la baja de la alícuota para el período fiscal 2018, que determinaron menores anticipos a los del año pasado.
Finalmente, el sistema de Seguridad Social sumó $74.590 millones, con un aumento interanual de sólo 22,6%, lo que reflejó un menor nivel nominal de salarios, menor cantidad de empleados registrados, y la tendencia de las empresas de “financiarse” con los planes de pago de la AFIP, a bajas tasas, que salir al mercado para tomar dinero y hacer frente a estas obligaciones.