El Gobierno provincial se comprometió a interceder para buscar una solución al reclamo de empresas cordobesas cuyas cuentas resultaron embargadas por la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA) por ser consideradas deudoras del fisco de esa jurisdicción, pese a no haber realizado operaciones fuera de la provincia de Córdoba.
Así quedó explícito luego de un encuentro que mantuvo el ministro de Industria, Comercio y Trabajo, Roberto Avalle, con dirigentes de la Cámara de Comercio de Córdoba.
Las acciones de ARBA, que en rigor habían comenzado ya el año pasado, se generalizaron en el arranque de 2010 y perjudicaron a empresas de diferentes rubros. Si bien esa agencia recaudadora es la que mayor perjuicio genera a las cordobesas, también hay problemas específicos con el fisco de la provincia de Santa Fe y el de Catamarca, según confiaron desde el sector empresario.
En ese marco, la Cámara de Industriales Metalúrgicos convocó el lunes próximo a sus asociados a analizar las acciones a seguir para afrontar el problema.
En tanto, fuentes de la Unión Industrial de Córdoba (UIC) revelaron a Comercio y Justicia que ya iniciaron un relevamiento entre las empresas enroladas en la entidad para conocer el perjuicio ocasionado. En ese marco, la semana próxima mantendrán una reunión en la que analizarán posibles acciones ante la situación para la que convocaron a profesionales que brindarían asesoramiento para afrontar el tema.
La situación ya fue advertida oportunamente por el Consejo Profesional de Ciencias Económicas quienes consignaron que esa percepción compulsiva del fisco bonaerense asumiendo potestades que no le serían propias, junto al denominado impuesto a la valija que perciben numerosos municipios de Córdoba, son dos de los aspectos que generan mayor preocupación en las empresas y demandan una tarea extra a los contadores de las compañías.
Por su parte, fuentes oficiales aseguraron que el tema podría ser motivo de una presentación por parte de la Provincia ante la Comisión Arbitral del Convenio Multilateral y luego ante la Comisión Federal de Impuestos, canales naturales para dirimir litigios impositivos y que en este caso podrían servir a los efectos de analizar el avance no sólo de ARBA sino también de otras jurisdicciones que, aunque en menor medida, también han instrumentado políticas del mismo tipo.
Complicados
“El año pasado eran situaciones específicas, pero este año la voracidad de ARBA es muy evidente y llovieron las denuncias de asociados ante la cámara”, señaló a este medio el secretario de la Cámara de Comercio de Córdoba, José Viale.
El dirigente dijo que encontraron buena predisposición de la Provincia para atender el reclamo e interceder mediante alguna acción concreta.
Viale recordó que el embargo de cuentas corrientes se produce de manera compulsiva y sólo bajo la presunción de que el comerciante debería estar inscripto en el fisco bonaerense por haber concretado alguna operación con un contribuyente con domicilio fiscal en Buenos Aires.
“Hay empresas que han realizado una transacción con un contribuyente con sede comercial en Córdoba pero inscripto en Buenos Aires. Esa empresa quedó inscripta en ARBA y ésta le comenzó a cobrar de manera compulsiva con retenciones en sus cuentas corrientes”, graficó Viale.
El dirigente recordó que existe un fallo de la Corte Suprema de Justicia ante una presentaci&