ESCUCHARSin embargo, el concepto se instala desde otra perspectiva, ya que 96% considera que las empresas tienen la misma responsabilidad que el gobierno a la hora de dar respuesta sobre temas tales como desempleo, desigualdad social, sostenibilidad medioambiental, entre otros.
“Los nuevos consumidores se están volviendo más críticos y valoran de forma creciente el comportamiento ético de las marcas”, es la principal conclusión del sexto informe realizado por Fundación Adecco, “El ciudadano y la RSE”.
Realizado por sexto año consecutivo, analiza los comportamientos de consumo y el nivel de responsabilidad social empresarial (RSE) en la sociedad. Aunque obtuvo que 60% afirma no estar familiarizado con las siglas y no entender su significado, el concepto se instala desde otra perspectiva, ya que 96% de los encuestados considera que las empresas tienen la misma responsabilidad que el gobierno a la hora de dar respuesta sobre temas tales como desempleo, desigualdad social, sostenibilidad medioambiental, entre otros.
Otro dato que destacan es el rol que los ciudadanos se otorgan a sí mismos como agentes responsables: 70% cree que la ciudadanía tiene mucha o bastante responsabilidad cuando se trata de reaccionar ante los desafíos que plantea la sociedad.
De este modo, los ciudadanos se convierten en el tercer actor social que debe asumir una mayor responsabilidad, según los propios encuestados; en el cuarto puesto ubican a los medios de comunicación, y el útlimo lugar lo ocupan las organizaciones del tercer sector como fundaciones y ONG.
Además, otras de las conlusiones más importantes es que existe una nueva generación de consumidores críticos que valoran cada vez más el comportamiento ético de las marcas. Ellos exigen una conducta responsable con el entorno en el que operan las empresas, desde temáticas ambientales como trato a los trabajadores, relación con la ciudadanía, etcétera.
Al situar la empresa en el segundo lugar con respecto a la responsabilidad, los ciudadanos se volvieron exigentes, ya que 63% de los consumidores penaliza las marcas que no considera responsables. Específicamente, 50% deja de adquirir el producto o servicio en cuestión, mientras que 10% no sólo deja de comprarlo sino que emite opiniones negativas en foros y redes sociales.
tres por ciento, además de lo anterior, realiza iniciativas como recogida de firmas o protestas en contra de la marca. Por último, 10% no penaliza a las marcas en función de su responsabilidad pero se plantea hacerlo en el futuro.
Evolución
Al comparar con el año anterior, el consumo responsable aumentó 1 punto porcentual. Esto se relaciona principalmente con las nuevas generaciones: los jóvenes son los más críticos. De los consumidores de entre 18 y 35 años, 70% sanciona las marcas menos responsables, mientras que la cifra desciende a 52% a partir de la citada edad. Esto se vincula con la generación de los millenials, según Francisco Mesonero, director General de la Fundación Adecco: “los millenials o nacidos a partir de 1980 constituyen una generación muy crítica y exigente, que no duda en dejar de consumir una marca tras una mala experiencia, frente a generaciones anteriores que manifestaban una mayor fidelidad o rutina de compra. Además, son altamente sociables y tienen un alto conocimiento de las redes sociales: comparten su opinión y recomiendan o desaconsejan productos y servicios, siendo mucho más sensibles a las experiencias de otros usuarios que a la emitida por la propia marca. Esta generación exige una mayor personalización y nuevos valores como la transparencia, la sostenibilidad y el compromiso social”.
Para finalizar, el estudio demuestra qué opinión tienen los encuestados de las empresas en las que trabajan. En este contexto, las prácticas responsables más conocidas por los encuestados y su lugar de trabajo son: la conciliación, la contratación de personas con discapacidad y el voluntariado corporativo.
Según Mesonero, “aunque buena parte de las empresas realiza acción social, las iniciativas de RSE que más calan son aquellas que atañen de forma directa a los empleados y a la mejora del clima laboral, como permitirles compaginar su vida personal con la profesional, involucrarles en acciones de voluntariado o incorporar personas con discapacidad, mostrando con ello su apertura a la diversidad que caracteriza a nuestra sociedad”.
Los principales resultados
– Penaliza a las marcas que no considera responsables 63% de los consumidores, 50% deja de adquirir el producto o servicio en cuestión, mientras que 13% va más allá y emite opiniones negativas en foros y redes sociales, llegando incluso a recoger firmas en contra de la marca si cree que vulnera derechos fundamentales.
– Afirma que desconoce el significado de las siglas “RSE” 60% de los encuestados.
– Considera que las empresas tienen la misma responsabilidad que el gobierno sobre las temáticas sociales y ambientales 96% de los encuestados.
– Cincuenta y seis por ciento de los encuestados con empleo opina que trabaja en una empresa socialmente responsable. Sin embargo, 60% considera que las compañías españolas están por debajo de las europeas en la escala de responsabilidad.
