Estados Unidos, Japón y la Unión Europea platearon a la Organización Mundial de Comercio objeciones respecto del nuevo Sistema Integral de Monitoreo de las Importaciones (SIMI) y aseguraron que el país no retiró todas las medidas restrictivas aplicadas por el anterior gobierno.
El gobierno del presidente Mauricio Macri dispuso, entre sus primeras medidas, la aplicación de un nuevo sistema de administración del comercio exterior, el Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones (SIMI), que contempla la aplicación de licencias automáticas y no automáticas, regladas por la Organización Mundial de Comercio (OMC), en reemplazo de las Declaraciones Juradas Anticipadas de Importaciones (DJAI), que debían desmantelarse el 31 de diciembre.
Sin embargo, el nuevo sistema generó reticencias de Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y Japón, países que consideraron que Argentina no resolvió en su totalidad el retiro de medidas restrictivas a las importaciones, implementadas durante el gobierno anterior.
Las objeciones fueron planteadas ayer por los representantes de esos países ante la OMC, durante una reunión del Órgano de Solución de Diferencias (OSD), en el cual los miembros ganaron la demanda contra Argentina por aplicación de las DJAI, declaradas por un panel (tribunal ad hoc) violatorias de la normativa internacional.
Los representantes argentinos en Ginebra, por su parte, reportaron que las DJAI y otras medidas declaradas restrictivas al comercio por parte del panel habían sido desmanteladas, por lo que las recomendaciones del OSD de readaptar el sistema de administración del comercio a las reglas de la OMC “fueron completamente implementadas”.
Pero distinta fue la interpretación de los demandantes, que expresaron “no estar en total conformidad” con el reporte brindado por la delegación argentina.
Sucede que, días después de que fueron publicadas en el Boletín Oficial, las disposiciones del SIMI generaron dudas entre los operadores ante inconsistencias en el sistema, lo que obligó a la Secretaría de Comercio a correcciones y aclaraciones, entre ellas, que seguían teniendo validez las DJAI presentadas en noviembre y diciembre ya aprobadas.
Aclaratorias
Ayer, ante la OMC y frente a la réplica de los países demandantes, el Gobierno argentino fue enfático y aseguró que “el sistema de licencias no automáticas no está sujeto al escrutinio del panel”.
No obstante, manifestó su disposición a trabajar con los tres demandantes para disipar cualquier duda sobre “malas interpretaciones de las medidas tomadas”.
El fallo del panel, por el reclamo presentado en demandas por separado por Estados Unidos, Japón y la UE, determinó que tanto el régimen de DJAI como otros requisitos fijados para importadores, denominado Prescripciones Relacionadas al Comercio (PRC), constituyen “una restricción a la importación de mercaderías” y, por lo tanto, son “incompatibles con el párrafo uno del artículo XI del GATT de 1994”, la normativa general que rige el comercio internacional de los países miembros .