En la cuarta audiencia del juicio por la desaparición y muerte de Facundo Rivera Alegre, los testigos que desfilaron por la Cámara 11ª del Crimen hicieron referencia a la supuesta cremación del cuerpo del “Rubio del Pasaje”.
Según surgió de los testimonios de Ramón Noriega y Gonzalo Suárez, por entonces capataz y director del cementerio, respectivamente, las llaves del predio del crematorio del cementerio municipal de barrio San Vicente estaban a cargo de personal policial. Ambos testigos coincidieron a su vez en que sólo personal designado ingresaba al lugar, que sólo funcionaba en horario matutino, a excepción que existiera una orden especial. También remarcaron que una sola persona no habría podido manipular un cuerpo en avanzado estado de descomposición.
Cabe recordar que en el cementerio trabajaba Aldo Monje, acusado del supuesto delito de “encubrimiento agravado”. La instrucción sospecha que el ex empleado municipal habría sido el nexo para hacer desaparecer el cuerpo de Facundo.