ESCUCHAREl sector electrónico, informático y de comunicaciones del país (compuesto por la gama de productos como circuitos impresos, componentes de control de energía y de agro-industrias, automatización e instrumental de medición, entre otros) exportó en el 2007 aproximadamente 33 millones de dólares en Sudamérica, Estados Unidos y México, entre otros, según las partidas arancelarias consultadas.
Este monto representa menos del uno por ciento de las importaciones que ejecutan sólo 14 países de la región, incluidos Estados Unidos, México y España, que en total compraron hace dos años materiales electrónicos, informáticos y de comunicaciones por 44 mil millones de dólares.
“El mercado es el mundo”, exclaman los especialistas de la industria argentina para convencerse del gran potencial con el que cuentan para catapultarse. Por tal motivo, las empresas nucleadas en la Cámara de Industrias Informáticas, Electrónicas y de Comunicaciones del Centro de Argentina (Ciiecca) solicitaron un relevamiento del sector, tendiente a identificar grupos exportadores y fortalecer su competitividad internacional.
La entidad solicitó el estudio a la Agencia ProCórdoba, que a través de la financiación del Consejo Federal de Inversiones (CFI), lo encomendó a consultores de la Fundación Fucader. Los profesionales Raúl Barroso y Franco Báez presentaron la primera parte del estudio de Ciiecca la semana pasada. El relevamiento se llevó a cabo entre 60 firmas del sector.
“Hicimos una segmentación por grupo e incluimos empresas cuyas producciones representan a todo el sector”, precisó a Comercio y Justicia Barroso. Así, la muesra abarca firmas que producen circuitos impresos, componentes electrónicos y de control de energía, materiales para la agro-industria, control y automatización industrial, instrumental de medición, robótica, telecomunicaciones, manufactura por contrato y electromedicina.
Fortalezas
El estudio recabó que las empresas cuentan con ciertas ventajas para salir al mercado externo. Las firmas disponen de más del 30% de su capacidad para aumentar su producción, es decir se relevó 33% de la capacidad ociosa.
“Entre los empleados, 40 por ciento es universitario, lo cual es un dato importante porque suma calificación”, precisó Barroso. Luego, 28% tiene título de secundario técnico. Cabe aclarar que el sector está compuesto por casi cien empresas: cada una promedia los diez empleados.
Del total, sólo 40% tiene experiencia exportadora; el destino de las colocaciones para la mayoría (83%) son los países del América del Sur.
El análisis también abarcó un estudio macroeconómico en los países donde las empresas manifestaron potencial para exportar. “Armamos un ranking para saber dónde está el mayor potencial; se analizaron variables como su PIB, relaciones con Argentina y mercado”, dijo Barroso. Resultaron atractivos 14 países, según este orden: Brasil, Uruguay, Estados Unidos, México, Perú, Ecuador, Chile, España, Bolivia, Paraguay, Venezuela, Colombia, Guatemala y Panamá.
Debilidades
El atraso de esta industria en materia de penetración en el mercado externo se debe a muchos factores. Entre las principales dificultades -puestas de manifiesto en el estudio- para exportar, la imposibilidad de acceso al crédito es la que lidera la nóm
