La presidenta Cristina Fernández remarcó ayer la necesidad de “elaborar un plan nacional de riego”, porque, según reconoció, “el sistema hídrico, en dos o tres años dejó de ser contingente para pasar a ser un problema estructural”.
Al presidir la presentación del Plan Nacional de la Miel, que tiene el propósito de ayudar a la repoblación de las cabañas apícolas, Cristina dijo que para llevar a cabo el plan “debemos articular esfuerzos del sector privado y del público para lograr mayor eficiencia”.
Según la Presidenta, “hay que cambiar la cultura de la pradera, que era la de esperar que la naturaleza nos provea” de lluvias. “Debido al cambio climático debemos tener una política con planificación estatal e inversión de productores en materia de riego, para que no sea ése un factor que incida en las condiciones de la actividad”.
“Otras variables, como pueden ser la caída de comodities o medidas proteccionistas de algunos países, escapan a nuestros manejos y para ello se aplican políticas para contrarrestarlas”, aseguró.
En cuanto a la producción de miel, la Presidenta señaló que “hay una necesidad de reducir esa exportación a granel y aumentar la exportación con mucho valor agregado, porque eso significará crecimiento para productores y bienestar para sus familias”.
Por otra parte, el vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Néstor Roulet, denunció que la participación de los tamberos sobre el valor final de productos cayó 11% en un año.
Entre mayo de 2007 y el mismo mes de 2008, el promedio bajó de 32 a 21%: “Hoy los tamberos cobran menos y los productos suben”, aseguró Roulet al presentar un estudio de costos sobre un grupo de artículos cuyo resultado demuestra que generan pérdidas a los productores.