La terminal brasileña de Fiat, en Betim, produjo diez millones de autos desde su inauguración, lo que le ha permitido convertirse en la mayor planta en el mundo de la empresa italiana. La fábrica abrió sus puertas en 1976 y produce actualmente 3.000 vehículos diarios, informó la empresa.
Fiat Brasil es la principal compradora de cajas y motores de la fábrica de Córdoba y también comercializa en ese país autos terminados producidos en la planta de Ferreyra. La capacidad productiva de Betim se situó en sus inicios en 63.000 unidades, mientras que el pasado año alcanzó 713.000 unidades. En la actualidad fabrica quince modelos diferentes en más de cien versiones distintas. Por otro lado, Fiat lidera este año el mercado automovilístico brasileño con una cuota de penetración del 24,6%, según datos de la asociación de fábricas Anfavea.