El teletrabajo, la movilidad empresarial y BYOD (Bring your Own Device, en castellano “trae tu propio dispositivo) continúan instalándose en las empresas, rompiendo con el paradigma tradicional y planteando nuevos desafíos tanto para los empleadores como para los empleados.
Por Christian Acosta * – Exclusivo para Comercio y Justicia
Pero estas nuevas modalidades de trabajo ya no son sólo una tendencia; datos de analistas demuestran que el mundo está al tanto y le da la bienvenida a esta transformación del entorno laboral. Por ejemplo, un estudio reciente de IDC confirma que existen 1.200 billones de trabajadores móviles a escala mundial. Esto incluye tanto a los trabajadores móviles de la oficina como aquellos que trabajan desde su hogar.
Y en este contexto, Argentina no está por fuera de esta situación. Según el sitio Freelancer.com, ya se registraron 38.700 personas para teletrabajar, mientras que las empresas sólo publicaron 8.832 proyectos de empleo bajo esta modalidad. Y desde el Gobierno nacional también se está impulsando el teletrabajo por medio de distintas resoluciones que buscan fomentarlo.
En este escenario, es claro que la incorporación de nuevas tecnologías que posibilitan estilos de trabajo móviles son clave para que las empresas puedan adaptarse a este nuevo entorno laboral que implica que el trabajo está dejando de ser un lugar al que vamos para pasar a ser una acción que realizamos desde el lugar y con el dispositivo que nos resulta más conveniente.
Si bien, el teletrabajo y la movilidad empresarial rompen con la idea de que trabajar implica necesariamente cumplir una cantidad de tiempo determinado en un lugar físico preciso; para hacer realidad estas formas de trabajo las empresas deben estar preparadas, ya que es una decisión que no puede tomarse apresuradamente.
El objetivo de implementar una mayor movilidad debe ser potenciar el trabajo de las personas, que son el recurso más valioso de la empresa y garantizar la productividad. Pero para lograrlo de forma exitosa es necesario adecuar la infraestructura tecnológica de la empresa para que se pueda brindar movilidad pero sin perder el control de la información. En este sentido, tecnologías como la virtualización de escritorios y MDM (mobile device management) permitirán aprovechar al máximo los beneficios que ofrece esta modalidad.
La virtualización de escritorios transforma los escritorios y las aplicaciones en un servicio a pedido disponible para cada usuario. Asimismo, les brinda a las organizaciones la flexibilidad de brindar acceso remoto a los empleados, pero la información a la que se accede no queda almacenada en el dispositivo sino segura en el centro de datos.
A la vez, las soluciones de MDM facilitan la gestión de dispositivos móviles, le permite a la empresa configurar las aplicaciones con las que los usuarios trabajan diariamente, monitorearlas y bloquear los dispositivos en caso de pérdida o si el empleado deja la compañía. MDM le da la posibilidad al gerente de IT de administrar todos los dispositivos móviles de la compañía cumpliendo con las políticas de seguridad.
En un contexto laboral -caracterizado por nuevos estilos de trabajo móviles- donde quizás años atrás tendencias que hoy han llegado para quedarse eran impensadas, el desafío está en que los diferentes departamentos de la compañía trabajen en conjunto con el objetivo de lograr que los empleados puedan trabajar en el momento y lugar que elijan, cumpliendo con las normativas y resguardando la seguridad de la información corporativa.
* Field Sales Manager para Argentina, Uruguay y Paraguay de Citrix.