Un parque temático de alto vuelo

En las cumbres más elevadas del valle de Calamuchita, la adrenalina, el vértigo, la diversión y la magia se funden en este emprendimiento inspirado en la región del Tirol y pensado para la recreación de toda la familia

Como un espejismo que se materializa a medida que se acortan las distancias hasta La Cumbrecita, emerge al costado de la ruta la figura de una aldeana. Su soledad, circundada por la gran extensión de sierras y pinares, le otorga a la imagen un tinte fantasmal. La vestimenta típica tirolesa de la mujer contrasta con la paleta de verdes, marrones y ocres que bañan los cerros más altos del Valle de Calamuchita.

Con una sonrisa, la dama se acerca al vehículo y despliega la información para acceder al Peñón del Águila, el parque temático de Sergio Roggio Resorts inspirado en la cultura centroeuropea e inserto en la reserva provincial natural del primer pueblo peatonal de la Argentina.

Se puede ingresar en la magia de la aventura alpina a pie desde el pueblo por la Estación Cedro, o desde la ruta en auto por la Estación Roble.

En ambas paradas, los pasajeros abordan un trencito, réplica de una máquina suiza pero con potencia de tractor, para ascender con firmeza el terreno sinuoso que los separa de la Estación del Pino, ubicada a metros del corazón del predio.

A pasos de allí se despliega el centro neurálgico del lugar que contempla la oficina de informes y venta de actividades, el local de venta donde se comercializan remeras, gorras, mates, y demás accesorios y recuerdos de la marca, y el punto de partida hacia todas las recreaciones.

Frente al letrero que enumera los diversos entretenimientos, los visitantes se disputan para probar las propuestas más arriesgadas, que encabezan las “tirolesas” y las travesías en vehículos 4×4.

Las tirolesas son cuerdas que se extienden de una punta a la otra de las montañas, a través de de la cuales y sujetados por arneses, se deslizan los participantes.

Las opciones se enmarcan en diversos circuitos. El vuelo del Águila, por ejemplo, contempla cinco tirolesas ubicadas a 40 metros de altura que completan 700 metros de recorrido. Pero los más arriesgados pueden optar por el Gran Vuelo del Águila, una tirolesa de 500 metros suspendida sobre el cauce del Río del Medio.

El equipo del parque, que reúne unos cincuenta jóvenes de extrema simpatía, se ocupa de acondicionar los visitantes y acompañarlos en esta odisea.

La sensación de abordar una tirolesa es como la de volar y, en este caso particular, apreciar un paisaje natural desde un punto de vista jamás imaginado.

En el listado de alternativas, esta experiencia puede completarse con un descenso en rapel, suspendidos desde una pared natural de 50 metros de alto.

Para quienes prefieren más aventura sin tanta adrenalina, el arborismo es otra elección acertada. Se trata de un circuito de plataformas entre la copa de los pinos que están conectadas entre sí por diferentes puentes colgantes de 12 metros de largo y ocho metros de altura.

El mapa de actividades se completa con una visita a la reserva natural, atractivo educativo, cultural y de contemplación a lo largo de un paseo conectado por puentes colgantes.

El predio también contempla un espacio para que los más pequeños disfruten del aire libre y del contacto con la naturaleza, con juegos de aventura, toboganes y puentes.

En verano, los visitantes pueden descansar de las actividades en la playa del Peñón del Águila y disfrutar de las aguas cristalinas del Río del Medio. El lugar está provisto de un bar que ofrece tablas y minutas tradicionales, además de refrescos y helados.

Delicias centroeuropeas

Otra parte del entretenimiento está concentrado en el Refugio de Gambrinus Restaurante. Se trata de una cabaña de dos plantas ambientada con el estilo suizo-alemán y enclavada entre montañas, pinares, cascadas y ríos.

La calidez del lugar también se aprecia en los platos de la cocina centroeuropea y las delicias del salmón, trucha, cordero y solomillo de cerdo. Tampoco faltan las minutas, las tablas de fiambres, las tortas galesas y los postres suculentos. Para cerrar la jornada, la organización guarda en la manga una sorpresa.

Frente al restaurante, se despliega un teatro cuyo marco escenográfico está resuelto con la magnitud del paisaje. Allí, el público está invitado a disfrutar de la obra de teatro “La leyenda de Gambrinus, el rey de la cerveza”.

El espectáculo desborda de profesionalismo, calidad y una puesta en escena digna de los mejores escenarios de la región. El show recrea la historia mitológica de la creación de la cerveza, por medio de un espectáculo musical que combina danza, humor y vestimentas típicas de la época.

Los tips de la aventura
Datos a tener en cuenta para visitar el predio durante el año

– Peñón del Aguila se encuentra a 36 km de Villa General Belgrano, colindante con la reserva hídrica provincial Pampa de Achala y La Cumbrecita.

-Ocupa una superficie de 200 hectáreas, a casi 1.450 metros sobre el nivel del mar.

– Los horarios de apertura son de miércoles a domingo en temporada baja y todos los días en temporada alta (enero y febrero), de 10 a 19.

– El precio de la entrada es de $20 para adultos y $10 para menores de 4 a 11 años.

– Varias líneas de colectivos llegan hasta La Cumbrecita desde la terminal de Córdoba. La duración del viaje es de aproximadamente tres horas y el precio del pasaje de $17,70.

-Para los colegios, Peñón del Águila tiene una propuesta de educación ambiental que combina entretenimiento y recreación con la formación personal.

– Peñón del Águila ofrece también opciones de paquetes corporativos a medida.

-También dispone de servicios para festejos de cumpleaños, casamientos, aniversarios y cualquier ocasión especial.

– Entre sus proyectos para este año, Peñón del Águila tiene previsto sumar un asador centro europeo frente al río, con nuevas propuestas en el menú.

– Además, planea ampliar su oferta para los turistas con una fábrica de cerveza artesanal.