ESCUCHARPara quienes estén interesados en descubrir las maravillas que ostenta el norte argentino, el emprendimiento turístico La Puna 9/40 ofrece por primera vez una experiencia de visita de pueblos y localidades habitadas por sus comunidades originarias instaladas a unos cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar.
El emprendimiento turístico La Puna 9/40 ofrece por primera vez en Jujuy una travesía única e integral para visitar pueblos y localidades habitadas por sus comunidades originarias instaladas a unos cuatro mil metros sobre el nivel del mar.
El recorrido permite apreciar sus costumbres ancestrales, así como sus particulares creencias religiosas, por lo que la propuesta fue bautizada “Experiencia Puna”.
Con una duración de cinco días y cuatro noches, la excursión invita a transitar las áreas naturales de la Puna, con el profundo compromiso de conservación del medio ambiente y de apoyo del bienestar de las comunidades originarias, fortaleciendo y acelerando el proceso de integración interregional en la Puna.
“A través de un viaje de turismo rural y de interacción con las comunidades locales se logra vivenciar un encuentro intercultural en armonía con la naturaleza, promoviendo actividades productivas y generando oportunidades de progreso a sus pobladores. Una experiencia digna de vivir y recordar”, destaca la organización.
En la Puna jujeña, la región más sorprendente y maravillosa del noroeste argentino, impactan los colores de las dunas sobre el horizonte, la orografía volcánica, las caminatas acompañadas por el viento y el profundo silencio de las montañas, las lagunas que albergan bandadas de flamencos, los irrepetibles arreos de llamas y las emotivas visitas a salares y pueblos alfareros.
“La Puna 9/40 ofrece sin duda una experiencia inigualable en un viaje sencillamente maravilloso. Vehículos acondicionados, guías personalizados, alojamiento y pensión completa en todo el recorrido visitando, entre otros lugares, El Mirador Oeste, el Valle de Marte (conocido como el Valle de la Luna) en Cusi Cusi, las Peñas de Ascalte en Cochinoca, Santa Catalina y El Angosto, al límite con Bolivia”, explicaron los responsables de diseñar el itinerario.
Los turistas también visitan centros artesanales para conocer los procesos de elaboración de piezas únicas. Singulares manufacturas textiles tales como tapices, guantes, gorros, medias, ponchos, chales y objetos tallados habitualmente con figuras de animales autóctonos de la zona.
“Esta propuesta invita a vibrar en armonía con una energía única, que no se encuentra en ningún otro lugar del mundo, en una verdadera fusión de paisajes dignos de una postal. Ideal para quienes disfrutan de la emoción de experimentar la naturaleza virgen, la flora, la fauna y la impronta del desierto sumado a los cielos nocturnos más hermosos que se hayan visto”, describieron sus impulsores.
Es una estimulación constante de los sentidos, claramente la emoción de la serenidad del alma. Un viaje por el interior de la Puna jujeña “es un recorrido por nuestras raíces, un descubrir constante”.
Programa
La excursión se inicia en el aeropuerto de Jujuy, generalmente un miércoles.
El primer día se recibe al contingente en la terminal aérea y se parte a Humahuaca. Se almuerza y se visita la Posta de Hornillos, el cuartel del ejército de Manuel Belgrano en su lucha contra los realistas, el Pucará en Tilcara y la Serranía de Hornocal (cerro de los 14 colores) en Humahuaca, donde se hace noche.
El segundo día se parte hacia Cusi Cusi y en el recorrido se visita Cochinoca, paso obligado en la ruta del Alto Perú, y las Peñas de Ascalte, impactante por sus formaciones volcánicas; se almuerza en Las Peñas de Ascalte y se visita la Laguna del Pozuelo (reservorio natural de agua dulce). Luego se propone hacer una caminata por el Valle de la Luna. En Cusi Cusi se recorre la Planta de Quínoa; y en el pueblo se dureme en el hostal Rincón de Cusi; además, se hace una caminata nocturna por los cerros.
El tercer día se realiza una travesía al Mirador Oeste, se visita el Pueblo Viejo y su iglesia, y la manufactura de Piedra Ónix. Luego se parte a Santa Catalina, pasando por San Juan de Oros y Timón Cruz, donde se conoce el pueblo y se hace noche.
El cuarto día se visita Casira, pueblo alfarero donde se presencia la fabricación de vasijas y artesanías. Por la tarde, se experimenta el arreo de llamas en la Finca de Felisa Solís.
Finalmente, el quinto día se parte a El Angosto visitando El Filo, uno de los paisajes más increíbles de La Puna. Luego se regresa a La Quiaca y se emprende el viaje de regreso previo un breve paso por la Feria Campesina, donde las cooperativas exponen sus tejidos de lana de llama.
Agenda de viaje
– Cómo llegar
La distancia entre Córdoba y San Salvador de Jujuy es de aproximadamente 900 kilómetros. También se puede ir en avión. Aerolíneas Argentinas opera vuelos directos.
– Dónde dormir
La excursión propone hacer noche en los distintos poblados de la Puna jujeña, entre los que se destacan los hostales Rincón del Cusi y Don Clemente.
– Imperdibles
– Visita al Pucará de Tilcara
– Caminata por el Valle de la Luna
– Recorrido por el pueblo de Cusi Cusi
– Visita al pueblo alfarero de Casira
– Arreo de llamas en la Finca de Felisa Solís.
– Visita a El Angosto
– Mas información
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