PUNTA DEL ESTE. Desde sus inicios, la península que divide las aguas del río de la Plata y el océano Atlántico fue refugio de la alta sociedad, para luego adquirir prestigio mundial como el balneario más glamoroso de Latinoamérica
“A lo largo de la ruta costera que conduce hacia el noroeste se aprecian los ingresos a las mansiones que tienen Marcelo Tinelli, Valeria Mazza, Shakira y la que ostentaba hasta hace un tiempo Mirtha Legrand”. Es el primer comentario que le surge al empleado de la casa de alquiler de autos emplazada en frente a la Terminal de Omnibus de Punta del Este.
Además de hacer referencia a que conoce “en persona y sin maquillaje a Moria Casán y que siempre ve a Susana Jiménez cuando se pasea por la Punta”, el fiel exponente de la hospitalidad esteña hace alarde de la importancia que tiene para ese destino uruguayo la presencia de la farándula argentina e internacional.
Pues Punta del Este es sinónimo de “celebridades” y mucho, pero mucho glamour.
Desde sus inicios, esta estrecha franja de tierra que divide las aguas del río de la Plata y del océano Atlántico fue refugio de la alta sociedad argentina y uruguaya, para luego adquirir prestigio mundial como el balneario más refinado de Latinoamérica.
La ciudad se enciende con los primeros rayos de sol que anticipan el verano y con la luminosidad de las estrellas del cine y la televisión que la eligen año a año para despuntar el vicio de mostrarse durante sus vacaciones.
El brillo y el lujo se cuela en todos los detalles. El parque automotor nutrido de descapotables último modelo y camionetas 4×4 descomunales, los taxis -soberbios Mercedez Benz, hoteles-boutiques de diseño y cadenas cinco estrellas, complejos de edificios faraónicos hasta con piscinas para cada apartamento y una oferta comercial protagonizada por las principales marcas premium del mundo, conforman el conjunto de postales que explican la inconfundible personalidad del lugar.
Su estilo seduce a un éxodo conformado por miles de turistas que invaden su creciente infraestructura durante las temporadas estivales atraídos también por la extensión infinita de playas diversas y el culto de embriagarse con los atardeceres más románticos sobre el mar.
Al ser una península, goza de la singularidad de contar con dos zonas costeras bien diferentes: La Brava y La Mansa. La primera, que se enfrenta con el océano Atlántico, está bañada por un oleaje impetuoso, mientras que el lado opuesto, donde se extiende el punto norte del río de la Plata, se caracteriza por sus aguas calmas y la ceremonial puesta del sol que se desintegra en el azul horizonte.
La población permanente del balneario es de 25 mil habitantes pero cuando estalla el verano, esta cantidad se multiplica por cien.
Para alojarse, las opciones oscilan entre el alquiler de departamentos y hoteles de todas las categorías a casonas descomunales frente a la costa. Entre los cinco estrellas se destaca el Conrad Punta del Este Resort & Casino, un ícono ineludible en el paisaje costero, que además concentra la mayor programación de eventos, cenas temáticas y recitales de la temporada.
Para distenderse, el abanico de propuestas es interminable. El recorrido a lo largo del puerto donde descansan yates, barcos pesqueros y veleros junto a simpáticos lobos marinos, la travesía hacia la isla Gorriti o la isla de Los Lobos, y las salidas a cines, teatros, casinos, shoppings y espectáculos deportivos, culturales y musicales completan una programación que se amplía con los años.
Para realizar compras o pasear durante la noche, la tradicional calle Gorlero, que atraviesa la península, quedó relegada a los comercios más populares y a la Feria de los Artesanos, para cederle el protagonismo a la arteria paralela, también conocida como “la 20”, que concentró un elegante paseo de tiendas de marcas multinacionales como Louis Vouiton, Tommy Hilfiger, Valentino, Gotex, Fendi, Donna Karan, Swarovsky, Burberry, Calvin Klein y Brookfield, entre otras.
También en los últimos años, el diseño tomó gran dimensión en el lugar, a raíz de lo cual, los alrededores de la avenida Italia fueron bautizados como el “Distric Design”, que nuclea las principales casas de decoración de renombre global.
Exclusivo y sereno
Como apuntaba en un principio el nativo esteño, la ruta que conduce hacia el noroeste de la Punta concentra lo más exclusivo del municipio. Una vez distanciados de la agitación y el ritmo festivo de la península, los balnearios de La Barra, Manantiales y José Ignacio amainan el ritmo y se ofrecen como paradas más calmas y sofisticadas.
Allí se concentra la elite esteña, como en un refugio entre bohemio y chic que alterna restaurantes de alta cocina, decenas de casas de arte y boutiques de moda con playas y paradores a tono.
Agenda de Viaje
Cómo Llegar: Distancia entre Punta del Este y Córdoba 1139 km. Pluna ofrece vuelos diarios a Montevideo desde u$s 225 final. El equipaje se cobra por separado. Son u$s 30 por tramo por cada 20 kilos.
Precios: El alquiler de un departamento para cuatro personas parte de u$s 2500 la quincena de enero, en febrero los precios disminuyen hasta 20%.
Hotel Conrad Punta del Este desde u$s 500 en temporada alta la habitción doble con desayuno.
Hotel Salsburgo desde u$s 90 la habitación doble con desayuno.
Almuerzo en el puerto desde u$s 20 por persona.
Alquiler de autos: desde u$s 45 por día.www.maldonado.gub.uy
www.turismo.maldonado.gub.uy
www.puntadelestehoteles.com
www.cidem.com.uy
www.adipe.com.uy.