Ese destino es uno de los más pintorescos del sur argentino y en esta época del año luce aún más, con sus montañas tapizadas de blanco
Esquel en un destino ideal para una temporada de esquí, por su nieve abundante y seca, puntos panorámicos extraordinarios, así como una variada oferta de actividades para vivir experiencias nuevas, que se pueden disfrutar y compartir con toda la familia: trineos para los niños; paseos en aerosilla; snowboard para los jóvenes, caminatas con raquetas para disfrutar en grupo. Todas estas postales únicas y complementarias conviven cada año en este punto sobresaliente de la región patagónica.
La Hoya, uno de los centros de esquí más pintorescos de la Argentina, se ubica a 12 kilómetros de Esquel. Con casi 50 años de vida, su tranquilidad y seguridad atrae a cientos de viajeros, quienes quiere conocer de cerca el esquí, el snowboard y recrearse en las laderas de las montañas.
Hasta mediados de octubre se extiende en La Hoya la temporada para esquiar, la más extensa del país. Un diseño natural que protege las pistas del impacto directo del sol, la variedad de sus pendientes y la nieve en polvo de excelente calidad así lo justifican .
Pistas especialmente diseñadas para realizar deslizamientos básicos son ideales para principiantes en los deportes de nieve.
Asimismo, La Hoya cuenta con una escuela de esquí y snowboard para acompañar estos primeros pasos en el deporte, además de una guardería con juegos de nieve y trineos para los más pequeños, siempre bajo el cuidado de personal especializado, lo que garantiza tranquilidad a los adultos mientras disfrutan de la montaña.
También los interesados en desafíos más arriesgados disfrutan de las cualidades distintivas de este centro invernal que tiene un desnivel de 645 metros, cuya cumbre alcanza 2.075 metros sobre el nivel del mar. La inclinación máxima es de 40 grados, con una longitud esquiable de 14 kilómetros.
Snowboard
Los amantes de esta actividad tienen a su disposición pistas diseñadas por profesionales y experimentados deportistas, quienes tuvieron en cuenta todas las medidas de seguridad. Además de saltos, cajones y barandas que propone uno de los mejores snowparks de Sudamérica, los más exigentes eligen desde hace varios años deslizarse sobre terrenos vírgenes, especialmente delimitados.
En esta parte de la montaña las máquinas no avanzan y el zigzaguear entre las lengas del bosque dejan las primeras huellas.
Caminatas con raquetas en bosques de lengas
Quien busca practicar una actividad física con exigencia física moderada y servicios de guía, puede aventurarse en bosques poblados por imponentes lengas, algunas de 30 metros de altura y coloridas hojas filosas, características de esta región montañosa, y emprender una caminatas con raqueta.
Los esquimales crearon este medio para transitar la nieve de manera más segura. Las raquetas originales eran de madera y hoy las deportivas combinan plástico con aluminio y pesan alrededor de 300 gramos.
Cabe señalar que con el sistema de raqutas es imposible resbalarse, por lo que -después de una explicación de cinco minutos- todos pueden comenzar a caminar.
Una caminata sobre la nieve hacia el sendero “Don Celso” permite -mediante recorridos de montaña- acceder a increíbles bosques de lengas que se levantan entre el blanco que adorna el invierno en esta región.
Al final del día llega el momento de relajarse y descansar en el hotel o pasear por la ciudad y beber un rico y humeante chocolate caliente.
Vale destacar que este mes, La Hoya ofrecerá los pases al precio de temporada baja hasta el fin de la temporada.
Más info: www.esquel.tur.ar