ESCUCHARRíos, lagos, montañas y estepa se combinan para crear el escenario propicio para una estadía llena de adrenalina y diversión.
Los paisajes no son solo para admirarlos, hay otra manera de disfrutarlos y es viviendo experiencias condimentadas por la aventura y la adrenalina. En este aspecto, la ciudad de Bariloche tiene todos los elementos para quienes aprecian esta manera de vivir cada destino.
En invierno, los buscadores de movimiento se suben al snowpark y visitan las pistas de esquí para expertos, mientras que en verano encuentran en la ciudad del sur argentino un sin fin de opciones para no quedarse quietos.
En este aspecto, durante estos meses, los deportes acuáticos se convierten en la vedette de la temporada. Como por ejemplo, las travesías en kayak que surcan ríos o lagos y son las de mayor demanda en esta época. Estas excursiones se pueden realizar en los lagos Nahuel Huapi, Moreno, Gutiérrez, Mascardi, Los Moscos, Hess, Fonk, Roca, Guillermo y Steffen, entre otros. Las salidas incluyen transporte, comidas, equipos para remar y guías bilingües. Algunas travesías duran varios días y las empresas que organizan incluyen las carpas y hasta equipos de cocina.
Otra opción para aventurarse en las aguas patagónicas es el rafting y el Stand Up Rafting, cabe recordar que Bariloche es el único lugar de América latina que ofrece esta novedosa propuesta deportiva que se practica en el Río Limay, y consiste en remar en grupo, parados, sentados o arrodillados, sobre una balsa inflable especialmente diseñada para esta disciplina. Se realiza siempre con el acompañamiento de un guía especializado.
En cuanto al rafting tradicional, los mejores sitios para experimentarlo son los ríos del parque nacional Nahuel Huapi que atraviesan bosques inmensos y garantizan un circuito desafiante a través de los rápidos que imprime el caudal entre huecos y olas de alta intensidad.
Por otro lado, para quienes son amantes de las alturas, Bariloche ofrece algunas maneras de disfrutarlas como el canopy, actividad que permite vivir la sensación de volar a través del bosque mientras se admiran los maravillosos paisajes del sur. Estas travesías, duran aproximadamente dos horas, cuentan con todos los elementos de seguridad y proponen distintos trayectos de entre cien y mil metros de largo del que pueden participar grandes y niños con asistencia de los instructores.
Otra posibilidad, un poco más osada, es el canyoning, que combina trekking, rappel, tirolesa, saltos desde trampolines naturales, nado y escalada. Esta actividad que concentra todas las emociones, demanda una ascenso de unos veinte minutos aproximadamente por el cerro y un descenso que combina tramos de rappel con pozos de agua cristalina hasta llegar a la cascada: el Salto del Vasco, de 30 metros de altura, continùa con un tramo a rappel o tirolesa (canopy) y finaliza con un trekking por la montaña.
El menú de vivencias se completa con las actividades de aventura en la montaña como las travesías en 4×4, los trekking, las caminatas y paseos en aerosillas, entre otras.
La cordillera regala senderos para todos los niveles y cada uno puede armar su propio camino. Para tener en cuenta, la web www.barilochetrekking.com brinda información útil que contiene información de 62 senderos, 6 travesías y 17 caminatas cortas, con un total de 450 km de senderos para recorrer. Cuenta con mapas navegables y descargables para GPS, preguntas frecuentes y recomendaciones. Es adaptable a todos los dispositivos y cuenta con información directa del pronóstico y clima del lugar.
Finalmente, la estepa de Bariloche es otro escenario que se puede aprovechar a travès de cabalgatas, paseos en bicicleta, pesca y circuitos de avistaje de aves, entre otros
Playas y balnearios
Bariloche tambièn resulta un buen sitio para quienes no conciben una temporada sin playa. Hay diferentes paradores como Bahía Serena, Playa Bonita y la playa del Kilómetro 4, donde se reùnen los bañistas que gozan de tomar sol y refrescarse en el agua de los lagos y ríos. Tambièn en estos sitios se pueden alquilar equipos de kayak, stand up paddle y de buceo, entre otros deportes acuáticos. Quienes no quieran trasladarse tanto por la avenida Bustillo, pueden disfrutar de las playas públicas del centro, que cuentan con guardavidas.
Por otro lado, el hecho de que Bariloche se encuentra a orillas del Nahuel Huapi y rodeada de otros lagos, la hace ideal para las excursiones lacustres. El trayecto más tradicional es el viaje a la Isla Victoria y el Bosque de los Arrayanes, zarpando del Puerto Pañuelos y recorriendo el lago hasta l Puerto Blest y la Cascada de los Cántaros; también se puede realizar el cruce andino y unir Argentina y Chile navegando.
Los que quieren conocer algo nuevo pueden optar por otro paseo no tan popular y que vale la pena realizar como la navegación por el Brazo Tristeza, que incluye una caminata por un bosque de coihues hasta llegar a la cascada del Arroyo Frey.
