El Turistólogo es una pyme cordobesa que diseña, desarrolla y produce souvenires, regalos y artesanías para el turismo. Comercializa más de 100 artículos.
El turismo es una industria que cada vez adquiere mayor fuerza. Y si bien hay sectores -como el hotelero y el gastronómico- que son los que principalmente se benefician con esta industria, existen otros rubros que también están directamente relacionados con el sector. Por caso, el “merchandising turístico” es un área que tiene un buen desempeño comercial, ya que la persona que viaja siempre busca llevarse un recuerdo o souvenir del lugar que visitó.
En este marco, la razón de ser de “El Turistólogo” es atender este mercado que traspasa las fronteras de Córdoba y alcanza todos los lugares donde llega el turismo. Se trata de una pyme cordobesa que se dedica al diseño, desarrollo y producción de merchandising turístico, ya sea como souvenir, regalos o artesanías.
Todo comenzó diez años cuando Javier Piña -licenciado en Turismo-, junto a Ivana Tévez, decidió trabajar por su cuenta y atender este nicho de mercado. “Veíamos que en otros países se hacían muchos souvenires turísticos y nos dimos cuenta de que muchas cosas acá no se hacen por los costos, otras tantas porque tenemos gustos diferentes y otras, simplemente, porque nadie las estaba haciendo. Y nos enfocamos en esto último”, explicó a Comercio y Justicia Piña.
Los productos
Básicamente, en el taller de la empresa se producen hoy artículos calados en metal y madera, cerámica y tela. Actualmente, El Turistólogo produce y comercializa más de 100 productos entre los que se destacan agendas con tapas de madera calada, imanes y productos de cerámica, entre otros.
En palabras de Javier, en los comienzos la comercialización de la mercadería -que hoy llega a todo el país- era de “puerta en puerta” y por medio de ferias artesanales que sirvieron para mostrar toda la producción y darse a conocer. Actualmente, más consolidados pero siempre en busca de nuevos destinos, también los pedidos pueden realizarse a través de la web.
Mapa del turismo argentino
A pesar de que El Turistólogo llega con sus bienes a casi todas provincias del país, según Piña, “turísticamente la Argentina es chiquita”. Con esto se refiere a que si bien es un país extenso en kilómetros, las ciudades que se consideran de “primer orden turístico son apenas unas 40, ó 50 como máximo”.
En este sentido, el emprendedor explicó que los lugares que se consideran de “primer orden” son aquellas ciudades que atraen un alto flujo de turismo, como ser Cataratas del Iguazú, Salta, Córdoba, El Calafate. De “segundo orden turístico” podrían ubicarse localidades como Villa General Belgrano, Merlo, San Luis, que no son de las más visitadas y, por último, de “tercer orden” puede ser Mina Clavero o las sierras de Córdoba, que si bien son importantes para la provincia, a nivel nacional compiten con lugares más importantes en este sentido.
“La intención es que nuestros productos sigan permaneciendo en todas las ciudades de primer orden, tener presencia en las de segundo y lo que más se pueda en las de tercer orden”, puntualizó Piña.
Al mismo tiempo, el emprendedor agregó que los puntos de venta más importantes para la empresa están repartidos por el país, aunque todos los extremos -el norte, Cataratas y el sur- son los mercados más importantes.
La producción es permanente durante todos los meses, aunque la venta es estacional. Esto significa que hay cuatro meses -enero, febrero, marzo y julio- cuando las ventas son “excelentes”, según el emprendedor. Luego hay meses más “flojos” -noviembre, diciembre y abril- y meses “malos”, como mayo, ya que difícilmente alguien se toma vacaciones en esa fecha.
El paisaje, la musa inspiradora
Que cada souvenir tenga una marca distintiva del lugar. Ése es el propósito que persigue la empresa al diseñar sus productos. “Siempre trabajamos pensando en que el turista se lleve algo representativo del destino que visita. Para esto, normalmente, trabajamos con base en fotografías de cada ciudad, que luego se convierte en un diseño. Cuando te enamorás de un paisaje te lo querés llevar y si el recuerdo que comprás lo representa de algún modo, te vas contento. Eso es lo que nos motiva”, aseguró Piña.
Profesionalizarse
De a poco y de la mano de la Fundación E+E, que se encarga de ayudar en el armado del plan de negocios de la empresa, El Turistólogo busca dejar de trabajar de forma manual y pasar a procesos más industrializados con tecnología de punta. “Estamos atravesando ese cambio”, finalizó.
Recuerdos de viaje
Trabajos en cerámica, metal y madera calada son algunas de las opciones de souvenir. La empresa adapta los diseños a cada lugar.