Llegar al fracaso en redes sociales es casi tanto más fácil que alcanzar el éxito. La creación y desarrollo de una presencia exitosa toma su tiempo y es algo que muchas pequeñas marcas no están dispuestas a entender. Pero, ¿cuáles son los principales errores que comenten las empresas en las redes sociales?
1. No desarrollar una voz propia. La mayoría de las pequeñas empresas suelen estar muy preocupadas por la imagen que perciben los demás sobre ellas y por eso tienen miedo de “meter la pata”. Al ocurrir esto, la empresa se suele mostrar tímida y demasiado correcta en sus publicaciones, lo que la vuelve poco natural y aburrida.
Y si sólo se dedica a compartir información de autopromoción o enlaces sobre el sector, error. Hay que ir mezclando los mensajes en la estrategia de contenidos.
2. No participar en la conversación. Los medios sociales son canales de doble dirección. Su comunidad no va a estar ahí únicamente para ser receptora de sus mensajes sino para interactuar. Si le cuesta que interactúen con Ud., lance preguntas, debates, aporte valor a las conversaciones. ¿Cuántas marcas en Twitter lanzan mensajes unidireccionales en sus cuentas? Muchas.
3. No tener una estrategia. Sin duda alguna lo que no podemos hacer al comenzar nuestra presencia en redes sociales, es no tener una estrategia definida. ¿Qué quiere conseguir?, ¿cuál es su objetivo?, de hecho, ¿dónde está su target potencial?, ¿qué quiere conseguir en cada red social?.
Una estrategia es vital si quiere progresar. ¿Sabe lo que quiere lograr con la configuración de sus perfiles en redes sociales?. Si el tiempo y la inversión que tiene dedicada a cada uno de sus objetivos no se corresponden con sus resultados, necesitará cambiar la estrategia, ¿no?
4. Número de actualizaciones. Es difícil conseguir relevancia sin tres factores: contenido propio, un toque humano (marca muy personalizada) y el número de actualizaciones (entender las plataformas).
Para eso, debemos entender cada una de las plataformas donde nos movemos. ¿Cómo se comportan usuarios y marcas en Facebook, Twitter o LinkedIn?.
Ése es otro gran problema que las marcas aún no han resuelto: entender las plataformas. Pero lo incluyo dentro de este apartado ya que están íntimamente relacionados.
Si no actualizamos nuestros perfiles con asiduidad tendremos muchas dificultades para tener visibilidad y reconocimiento en social media. Algunas marcas pueden pensar que para publicar contenido “sin sentido” mejor no publicar. Tal vez, si esas marcas creen que no tienen nada que decir, no deban entrar en redes sociales.
Debemos saber que en Twitter podemos publicar a diario, con una media de 3 a 10 tweets o en Facebook tener de 3 a 5 posts semanales (esto es solo un ejemplo, luego mida y compruebe qué funciona mejor).
Lo que no podemos hacer, por ejemplo, es vincular nuestras cuentas de Twitter, Facebook y LinkedIn y publicar el mismo contenido en cada red. A veces miro LinkedIn y me asusta ver las actualizaciones de algunos usuarios que entienden esta red como Twitter. Y no, LinkedIn no es Twitter.
5. Omnipresencia Social. Cuando marca su estrategia desde el inicio, este problema suele desaparecer. Puede estar presente en Facebook, Twitter, LinkedIn, YouTube, Vimeo, Instagram, Slideshare o Pinterest. Si lo hace es porque tiene un equipo profesional a su espalda que se encargará de actualizar esos canales y tiene, por supuesto, tiempo disponible.
En muchas ocasiones, es interesante vigilar la presencia de su competencia, ver dónde están y cómo lo están haciendo. También puede analizar, tras un período de prueba, qué redes sociales se asocian mejor con sus potenciales clientes y sus objetivos.
Es posible que cualquiera de estas redes sociales, en las que no confiaba, le den mejores resultados de lo que piensa.
Existen otros errores como la mala ortografía o publicar contenidos ofensivos o inapropiados (reputación on line, cuidado) que habitualmente cometen las empresas en redes sociales.