Greenway, un emprendimiento de bioplásticos hecho con desechos de palta

Camila Leuca y Victoria Ochoa, son las jóvenes emprendedoras que crearon Greenway, un proyecto que nació a partir de una propuesta realizada para el Instituto Superior de Comercio Exterior de la ciudad de Córdoba. 

La propuesta fue premiada por el Concurso Ideas Emprendedoras 2021 de la Agencia Innovar y Emprender y -aunque está en una fase de desarrollo- tiene potencial para crecer y convertirse en un proyecto sostenible, inclusivo y ecológico. 

La iniciativa consiste en la elaboración de elementos bioplásticos conformados en 60% por biopolímero de palta y, en 40%, por compuestos orgánicos sintéticos. Dichos compuestos se descomponen en 240 días. De esta manera su proceso de biodegradación contribuye a la reducción de la huella de carbono, la purificación de los océanos y la disminución del impacto ambiental negativo que provoca el plástico en la Tierra.

Greenway surgió a partir de un trabajo que consistía en presentar un emprendimiento y demostrar su factibilidad y sustentabilidad. “Desde el inicio supimos que queríamos algo que además de cumplir con estos principios, se ocupe de dar soluciones a los problemas ambientales importantes como los desechos plásticos”, cuenta Leuca. 

La joven emprendedora relata que cuando hicieron la presentación de Greenway, Simón Blengino, profesor de la materia Práctica Profesionalizante, vio el potencial en la propuesta. “Así que nos propuso que nos presentáramos al Concurso de Ideas Emprendedoras 2021, en el que fuimos premiadas con el quinto puesto”, dice orgullosa Leuca. 

“Nuestra misión es satisfacer a nuestros consumidores con productos biodegradables de calidad, reemplazando el consumo de plástico y generando una innovación regional en nuestro país”, agrega Ochoa. 

Las estudiantes añaden que en su propuesta buscan que sus productos inspiren un cambio de conciencia. “Y se transformen en vehículo para generar un menor impacto ambiental”, dice Leuca. 

Greenway además de brindar una solución de triple impacto, en la que además de la rentabilidad financiera intenta generar un impacto de concientización en la comunidad y de cuidado del medioambiente, gracias a las prácticas eco-friendly utilizadas. 

El objetivo de Greenway es ser parte de este movimiento, considerando las tendencias medioambientales que aporta valor a propuestas similares y que contribuye a la construcción de una economía ecológica y a un modelo de negocios sustentable.

El emprendimiento cumple con los objetivos de la economía circular, ya que se optimiza el uso de este desecho que es la semilla de palta, para convertirlo en un recurso, reintroduciéndolo en el circuito económico. “Luego de ser utilizados, nuestros bioplásticos pueden ser enterrados y se descompondrán en la tierra”, señala Ochoa.

La proyección que tienen es iniciar el proyecto en una escala pequeña, obteniendo la materia prima de proveedores locales. “En un futuro, queremos migrar estas operaciones a un nivel internacional, del cual obtendríamos el insumo proveniente de empresas de México y de Estados Unidos”, proyecta Leuca. 

En el proceso de producción de nuestros bioplásticos tomaron como referente a la empresa mexicana Biofase y planean implementar un sistema productivo similar pero con una visión local. “Nuestra idea es desarrollar un proceso de aprovechamiento del desecho de palta proveniente de la industria alimenticia de la localidad de Arroyito y ciudades aledañas. Esto nos posibilitaría el tratamiento con biotecnologías de nuestra biomasa vegetal”, reflexiona Ochoa. 

Las instalaciones de Greenway estarían ubicadas en Arroyito, Córdoba. Las principales instituciones aliadas con las que esperan estar vinculadas con el emprendimiento son la Cámara de Comercio, Industria y Minería de Córdoba, por medio de la quel participaron en el Concurso Ideas Emprendedoras 2021 y la Municipalidad de Arroyito, presente mediante un comité de medioambiente.

“Nuestro objetivo como grupo es seguir capacitándonos en el ámbito del emprendedurismo para poder, en un futuro, hacer de este proyecto o de cualquier iniciativa que nos propongamos, una realidad”, agregan las jóvenes. 

Adelantan que les gustaría seguir difundiendo la iniciativa y formar parte de foros, seminarios, comités y espacios donde se compartan y potencien este tipo de proyectos innovadores. “Para impactar más en nuestras comunidades debemos lograr una mayor difusión, para que el público en general pueda conocer nuestro proyecto. Además nos gustaría encontrar a personas comprometidas con el medio ambiente y con nuestra idea innovadora que nos puedan aportar y ayudar a seguir creciendo”, finaliza Ochoa.