La plataforma, que es chilena, ya cuenta con más de 1.500 usuarios suscritos de ese país, Perú, Argentina y Colombia. Es especialista en el desarrollo de estrategias de comunicación digital a través de dispositivos móviles y redes sociales.
Lanzada hace menos de un año por el ingeniero comercial Rodrigo Zambrano, la periodista Carolina Navarrete y el diseñador belga Stefan Baeten, Moovshake es la primera agencia de publicidad digital en Latinoamérica basada en los principios del crowdsourcing (financiamiento colectivo).
A través de su plataforma web, en la que cualquier persona puede registrarse de manera gratuita, los profesionales inscriptos participan de licitaciones privadas de grandes empresas que los están buscando para desarrollar campañas de publicidad y marketing digital.
“Creamos y potenciamos marcas en la era digital, trabajando con una red de talentos conectados a través de nuestra plataforma, donde pueden participar colaborativamente en procesos creativos con grandes marcas”, explica Navarrete, al frente de Moovshake.
La plataforma ya cuenta con más de 5.000 usuarios suscriptos de Chile, Perú, Argentina y Colombia, todos talentos digitales que ya han comenzado a colaborar en los proyectos que desarrolla la agencia con sus clientes.
Razón de ser
Moovshake es especialista en el desarrollo de estrategias de comunicación digital a través de dispositivos móviles y redes sociales, plataformas que actualmente son cada vez más masivas y transversales en todos los países de Latinoamérica.
“Mientras las otras agencias trabajan y desarrollan sus proyectos con un equipo definido y asignado para cada cuenta, Moovshake selecciona los talentos digitales adecuados para cada proyecto, los selecciona y los convoca, licitando ideas creativas y desarrollos tecnológicos”, explica Navarrete.
La industria del crowdsourcing
Aunque no existen cifras oficiales sobre los montos que mueve la industria del financiamiento colectivo, según el estudio Twitch Crowdsourcing: Crowd Contributions in Short Bursts of Time, de la universidad de Stanford, existen 16 millones de usuarios de plataformas masivas de crowdsourcing en el mundo, perteneciendo 63% a Estados Unidos, 20% a Europa y solo siete por ciento a Latinoamérica.
Algunos casos de éxito
Uno de los casos más emblemáticos de socialización de proyectos a través del crowdsourcing es el de la plataforma My Starbucks Idea, en que el público de la famosa cadena de cafeterías puede proponer nuevos proyectos y abrir discusiones sobre tópicos relacionados con nuevos productos y servicio al cliente.
Otro caso conocido es el de Doritos, que en 2006 dejó en manos de sus fans el diseño de su comercial para el Super Bowl, a cambio de la oportunidad de asistir al evento y US$25.000.
Otras empresas que recurren al crowdsourcing regularmente para el diseño de sus campañas creativas son P&G, Wallmart y Lego.