En los últimos años la restricción del crédito a empresas es una constante. Los mayores requerimientos de capital por parte de los reguladores, la elevada tasa de morosidad o la contracción de la demanda interna causaron un escenario adverso para aquellos que buscaban financiación para sus proyectos en muchos países.
Por Deutsche Bank *
En este entorno tan complejo, surge la pregunta: ¿Qué debe tener en cuenta una pyme para obtener un préstamo? Deutsche Bank, analiza los puntos claves a la hora de solicitar un crédito:
1. Negocio exportador
Un negocio exportador es un negocio más fuerte. Cada vez más es habitual encontrarnos con empresas con presencia internacional. En un momento donde la demanda interna está en caída, resulta fundamental contar con un negocio donde haya diversificación de ingresos, informa Europa Press.
Aquellas empresas que han sabido buscar oportunidades en el exterior tienen más facilidad para sobreponerse a situaciones complejas, y éste es un factor que suelen valorar los comités de riesgos de los bancos.
Para la misma empresa es mucho más fácil conseguir la aprobación para una financiación de exportaciones que una línea de financiación para su negocio nacional.
2. Un buen plan de futuro
Uno de los errores más frecuentes de muchas empresas es no tener una buena planificación a futuro. Para una compañía, tan importante es la salud financiera pasada como unas buenas previsiones.
A la hora de obtener crédito, los balances pasados son una información útil, pero el análisis moderno de créditos de las entidades financieras no se basa ya tanto en el pasado como en el futuro. Una buena previsión a medio plazo (hasta 3 años) es básica.
3. Información financiera completa y detallada
Si bien es cierto que lo más importante a la hora de conceder un préstamo es analizar la capacidad de pago de una empresa a futuro, toda la información financiera que se ofrezca a la entidad ayuda a tomar una decisión.
La mejor carta de presentación de una compañía es ofrecer los balances y cuenta de resultados de los últimos tres años de una manera clara, completa y detallada, explicando todo cambio significativo en las diferentes magnitudes: si se han reducido las ventas se debe explicar por qué, y qué se piensa hacer para que vuelvan a incrementarse.
4. La dirección, el timón del proyecto
Los resultados de una empresa son, en buena medida, el reflejo de la actividad del management’. Un equipo directivo bien preparado resulta clave.
Los gestores de las entidades financieras llegan a conocer muy bien a la dirección de las empresas clientes y su recomendación sobre quien dirige la empresa tiene peso en la decisión de otorgar un crédito. Asimismo, tener un buen plan de sucesión en una empresa familiar es un intangible que debe valorar cualquier firma.
5. Mix de financiación
En los momentos de mayor dificultad, tener diferentes fuentes de financiación puede dotar a nuestro negocio de cierta independencia financiera. Ante la restricción de crédito bancario, debemos ser capaces de buscar alternativas que no frenen nuestro crecimiento.
Además de incrementar la capitalización y figuras como los Business Angels, en los últimos meses han empezado a proliferar nuevas fuentes de financiación como Direct Lending por parte de fondos o el Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF) para empresas que ya cuentan con un cierto tamaño.
Si somos capaces de tener un buen mix de financiación, nuestro negocio estará mejor preparado para el futuro.
6. ¿Para qué?
El último punto, pero no por ello el menos importante, es explicar claramente el objetivo de la financiación. Detrás de esa necesidad debe haber una estrategia definida respecto en qué se va a destinar ese dinero.
Si eso está claro, saber explicarlo y justificar cómo la financiación mejorará nuestra empresa será mucho más fácil nuestro objetivo: ¡Que nos la concedan!
* La entidad financiera llegó a Latinoamérica a fines del siglo XIX con el nombre
de Banco Alemán Transatlántico.