Aproximadamente un centenar de las empresas a las que ha apoyado la el programa de innovación abierta de Telefónica (Open Future) trabaja con la multinacional como socio. De ese centenar, unas 60 lo hacen en algún país en Latinoamérica y unas 40 en Reino Unido, Alemania y España.
El programa tiene inversiones en 450 compañías repartidas casi la mitad en Latinoamérica y 35% en Europa (17% del total en España).
La inversión media de Telefónica en estas empresas emergentes es de unos 150.000 euros por compañía –en toda su historia han sido 150 millones invertidos en programas de innovación abierta, aunque las inversiones de mayor cuantía dependen de otros departamentos- y el objetivo del nuevo responsable del programa de Innovación Abierta de la compañía, Miguel Arias, es invertir en “entre 30 y 50 compañías cada año” siempre que tengan “sentido estratégico” para la empresa.
Esto quiere decir que la compañía de telecomunicaciones buscará proyectos emergentes en áreas como Internet de las Cosas, inteligencia artificial, aprendizaje automático, realidad virtual y aumentada, ciberseguridad y eficiencia operativa.
“Hay dos sistemas que tienen difícil entenderse, las startups que son ágiles y frágiles, y las grandes compañías que son más sólidas pero menos flexibles. Nosotros actuamos de interfaz entre esos dos mundos para que se entiendan, somos un traductor que junta necesidades con soluciones”, explicó Arias.
“Trabajar con las startups ayuda a Telefónica a ser ella más innovadora y más ágil. En la casa hablamos de que el ‘elefante tiene que bailar’, y a mí me gusta decir que tiene que aprender a bailar con las ‘gacelas’, las startups, sin pisarlas”, aseguró.