Autoridades nacionales acordaron con sus pares brasileños el fortalecimiento del comercio bilateral que incluye productos surgidos de economías regionales y emprendimientos familiares.
Los estados nacionales de Argentina y Brasil acordaron esta semana trabajar conjuntamente en la elaboración de un plan de compras públicas de alimentos destinado a fortalecer la comercialización de productos surgidos de la agricultura familiar.
Así se desprendió de un encuentro que mantuvo la secretaria de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Carla Campos Bilbao, con el ministro de Desarrollo Agrario de la República Federativa de Brasil, Gilberto José Spier “Pepe” Vargas. El encuentro ocurrió en el marco de la 40° reunión del Comité de Seguridad Alimentaria Mundial organizada por el Organismo de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), que se realiza durante esta semana en Roma, Italia.
Campos Bilbao describió la reunión como “un ámbito muy fructífero para avanzar en un intercambio comercial entre Argentina y Brasil que permita nuevas instancias de comercialización para los pequeños productores”.
Avanzar en el programa
Para desarrollar e.rama, uno de los objetivos principales radica en articular los medios para que los organismos públicos, en cualquiera de sus estamentos, establezcan al sector de la pequeña y mediana agricultura como principal proveedor.
“Buscamos que los estados nacionales actúen como integradores de los pequeños productores agropecuarios a los circuitos de comercialización”, señaló Campos Bilbao.
Brasil y Argentina ya han organizado seminarios internacionales sobre Compras Públicas en el marco del Mercosur, en los que se ha puesto en valor “la integración regional y la definición como bloque de políticas públicas para este sector”, indicó la funcionaria nacional.
“La implementación de modelos de políticas de compras públicas a la agricultura familiar colabora con la inclusión a circuitos comerciales y genera oportunidades para el desarrollo local por medio de la producción de alimentos, la generación de empleo y la ocupación y ordenamiento de los territorios”, consideró Campos Bilbao.
La delegación argentina participó de reuniones con autoridades de los ministerios de Agricultura y Desarrollo Social de Uruguay y distintas organizaciones de la sociedad civil. En esos encuentros se presentaron las diferentes modalidades de políticas públicas dirigidas a facilitar el comercio de la agricultura familiar. De la misma manera, las organizaciones de pequeños productores compartieron con los presentes su visión y experiencias acerca del alcance de éstas.
La posibilidad de organizar compras directas a productores familiares en las localidades permite, por un lado, el fortalecimiento de los productores a partir de una mayor apropiación de la renta por acotar la cadena comercial, y por el otro, la recirculación de la renta a escala local.
Los agricultores familiares, en tanto, producen con la garantía de tener parte de la comercialización resuelta y el apoyo de los gobiernos nacionales por medio de diferentes programas.
Emprendimientos familiares
Se estima que, en el Mercosur, 65 por ciento del abastecimiento de alimentos frescos –carne, leche, frutas y verduras- es aportado por emprendimientos de la agricultura familiar. Este sector representa, a su vez, 83 por ciento de los establecimientos agropecuarios en el bloque regional.
Por otra parte, Campos Bilbao y Vargas dialogaron sobre la reciente incorporación de la República Bolivariana de Venezuela al bloque regional del Mercosur y la integración de los pequeños productores de ese país a las políticas de desarrollo que impulsa la Reunión Especializada para la Agricultura Familiar (REAF).