La ocupación en las Unidades de Terapia Intensiva de instituciones públicas y privadas continúa por encima del 90% en seis provincias, de acuerdo al informe que realiza cada semana la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI), mientras que el porcentaje promedio a nivel país es del 87%.
Como en cada informe semanal, la sociedad científica advierte que este informe se basa en encuestas que envían a las instituciones que responden en forma voluntaria y que es sólo una muestra, “por lo que no es prudente extraer conclusiones por encima de las estadísticas oficiales”.
El estudio, que esta semana se realizó el viernes y contó con la participación de 156 UTIs, lo que representa 3.004 camas, arrojó que el 60% de la ocupación corresponde a pacientes con Covid-19, de los cuales el 74% requirió asistencia respiratoria mecánica (ARM), y 4% cánulas de alto flujo (CAFO).
Los pacientes con ARM fuera de la terapia intensiva, que habían alcanzado el 25% en informes anteriores, descendieron al 9%.
Si bien se observa una leve disminución de la ocupación de camas en casi todas las provincias, en seis jurisdicciones las instituciones reportaron que continúan con un porcentaje superior al 90%: Catamarca (95,34%), Mendoza (90,11%), Río Negro (97,06%), San Luis (90,16%), Santiago del Estero (94,23%) y Tucumán (93,20%).
El 13% de los centros de salud consultados dijeron tener camas libres.
En el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), con 45 UTIs analizadas (1.028 camas), se registró una ocupación del 85% -inferior a la registrada en las semanas anteriores-, con un aumento de pacientes no Covid; el 84,8% de los pacientes con coronavirus estuvieron con ARM.
Uno de los objetivos esta vez de la SATI para esta semana fue medir las condiciones laborales de los médicos en las UTI: “La medición de las condiciones fue dificultosa, debido a que en una misma institución había médicos en relación de dependencia, sin relación de dependencia, y algunos que cobran en forma mixta”, indicó el informe.
En este aspecto, identificaron que el 58% de los médicos de guardia y el 67% de los Jefes de UTI se encuentran en relación de dependencia, y el resto trabaja sin relación de dependencia, facturando honorarios.
En tanto que la distribución de horas de guardia mostró que un 69% de los profesionales cumple guardias de 24 horas.
El valor promedio de la hora médica de los que trabajan en relación de dependencia fue de $883 ($836 en el público y $968 en el privado); y de los médicos que trabajan sin relación de dependencia fue de $840 ($792 en el público y $874 en el privado).
El sueldo promedio por 24 horas fue de $80.640 en relación de dependencia y de $84.768 sin relación de dependencia.
El valor de la hora guardia es diferente en cada provincia: en Ciudad de Buenos Aires, por ejemplo, fue de $978, en el sur de la Provincia de Buenos Aires de $757, en las provincias de la región Centro del país $588, en el Litoral $600, en el Noroeste $675, en la Patagonia $1.100 y en Santa Fe $767.
La SATI destacó que “cuando se preguntó si los médicos de guardia que se enferman de Covid-19 continúan cobrando su sueldo, en el 33% de las instituciones refirieron que no (46% en el privado y 15% en el público)” en tanto que el 40% promedio no dispone de vacaciones pagas, porcentaje que es muy inferior en las instituciones públicas (sólo el 18%).
“Observamos una marcada precariedad laboral que se refleja por un insuficiente valor de la hora médica que se acerca a la línea de pobreza, junto a una desprotección laboral de muchos intensivistas del país”, remarcó la SATI.
“Esto nos obliga a reclamar enérgicamente mejores condiciones laborales”, sostuvo el informe y entre las demandas exigen: trabajo en relación de dependencia, mejora de los salarios y honorarios, licencia por enfermedad, licencias ordinarias, y una reducción de la jornada laboral por tarea insalubre.