ESCUCHARUno de cada dos empleados de las fábricas de vehículos temen ser despedidos el año que viene. En el caso de la industria farmacéutica, tres de cada diez expresaron la misma aflicción. Resultados de un relevamiento de expectativas en el país.
Los trabajadores de los sectores automotor, de laboratorios y de agroindustria son quienes más temen perder su empleo en 2015.
El orden de la preocupación por hipotéticos despidos es: quienes trabajan en la industria automotriz (uno de cada dos empleados); los de laboratorios (tres de cada diez) y finalmente los agroindustriales (dos de cada 10). Estos datos surgen del Workmonitor, relevamiento correspondiente al cuarto trimestre del año, divulgado ayer por la consultora Randstad. El informe releva las expectativas, estados de ánimo y comportamientos de los trabajadores en Argentina.
“El miedo a perder el empleo creció tres puntos porcentuales en el último trimestre del año, ubicándose en un promedio de 7%. En paralelo, la búsqueda activa de un nuevo empleo aumentó, incluyendo a 15% de los trabajadores y la confianza por encontrar otro trabajo se mantuvo estable, con un índice de 66%. Los jóvenes de 18 a 24 y de 25 a 34 años son los más confiados (75% y 77%, respectivamente)”, sostuvo el informe.
El cierre del año parece generar expectativas por partida doble entre los trabajadores argentinos, ya que ocho de cada 10 esperan recibir un bono extra en diciembre, así como un aumento de su sueldo antes de la finalización del año. “El 62% de los trabajadores acompaña esos deseos con una visión negativa de lo que será la evolución de la economía nacional en 2015”, advierte el relevamiento.
Andrea Ávila, CEO de Randstad, comentó que cuando llega fin de año aparece el clásico tema de los bonos, y los ajustes salariales vuelven al tope de la agenda corporativa. “Este año, la situación resulta más compleja en un contexto en el que las empresas han tenido menor crecimiento que el esperado y se han impuesto esquemas de férreo control de costos como respuesta al crecimiento de la inflación. Una buena estrategia para evitar ansiedad, ‘ruidos’ y expectativas desmedidas entre el personal en una coyuntura como la actual es transparentar completamente la política de bonos y las variables sobre las que se basa su asignación y distribución, de manera que, al compartirla, el personal sea parte del proceso”, sostuvo.
En lo que respecta a la rotación de personal, durante 2014 la búsqueda de mejores condiciones fue la principal razón que movilizó a la gente a cambiarse de empleo. Así lo indicó 32% de los trabajadores consultados. En segundo término se ubicaron los deseos personales de cambio (28%), le siguieron las causas organizacionales (17%), las causas personales (15%), la insatisfacción con el empleador (12%), las ambiciones vinculadas con la carrera profesional (8%), la insatisfacción del empleador con el trabajador (8%) y las ambiciones en el área del management (7%).
